Recoger el pelo en una coleta resulta muy favorecedor. Muchas veces nos complicamos la vida de manera absurda cuando el gesto más sencillo es capaz de terminar nuestro ‘look’ de manera impecable. Una cola es adecuada para nuestro pelo siempre que tengamos un largo apropiado y una melena abundante, si nuestro pelo llega al hombro, el recogido tendrá aspecto de escoba (sólo se verán las puntas) y si nuestro pelo es fino o poco abundante, la coleta se verá pobre.

Tamara Falcó es el ejemplo de que éste es un peinado perfecto para un estilismo ‘casual’. Pero también nos encanta el ‘look’ de Macarena García, con vestidazo y joyas para lucir en la alfombra roja. Para hacer el peinado más sofisticado es un buen truco esconder la gomilla bajo un mechón de pelo.

También puedes probar a decorar la coleta con varias gomillas (lisas, de colores o de ‘strass’) que la divida en varios trozos iguales o no. Una vez hechas las divisiones, mete los dedos entre el pelo y ahueca cada uno de los trozos, como se aprecia en la imagen de Olivia Wilde.

No es recomendable usar este recogido si llevas flequillo ni con cardados. Para que quede limpio, como el de la modelo María León, procura peinar bien la zona superior del pelo (hacia atrás, con raya al lado o en medio), así el resultado será menos recargado.

Una trenza no sólo te permite mantener el pelo limpio por más tiempo, también conseguirás que se ondule cuando la deshagas. Para conseguir un aspecto fresco y natural, copia a Vanessa Lorenzo: recoge la trenza baja dejando algunos cabellos que sobresalgan. Para un estilo ‘niña buena’, nada mejor que el ejemplo de Jessica Alba: una raya al lado y la trenza bien apretada.

La princesa Letizia lleva un peinado de aspecto improvisado y más informal, a medio camino entre la coleta y la trenza. Lo consigues formando una trenza hasta la mitad de la melena, que sujetas con una goma, y dejando libre el resto del cabello.

Para conseguir un ‘look’ Lolita basta con llevar las coletas y las trenzas a pares. Es el peinado más infantil y, sin duda, dará un aire naif a tu estilismo. Ashley Greene, Doutzen Kroes y Rita Ora han probado diferentes versiones, coletas, trenzas y trenzas de espiga, para hacer deporte, para un día de verano y para un posado en el ‘photocall’. Muy adecuado si quieres transmitir una imagen aniñada, aunque el candor pasados los 20 sea difícil de creer.

Una simple horquilla puede ser la gran aliada de las medias melenas. Si quieres conseguir un aspecto pulcro y limpio, hazte la raya, peina tu melena hacia el lado contrario y sujétala con una horquilla. Si buscas un ‘look’ despejado, recoge el cabello a la altura de la oreja, como Emma Watson. La otra opción es, como Emily Blunt, recurrir al estilo de los años 40: ondular la melena y sujetar el pelo en el límite de la frente.

Para un aspecto más colegial sustituye las horquillas por los pasadores. Aunque su función sea prácticamente la misma cambia significativamente tu aspecto. Si utilizas este accesorio, potencia su efecto infantil con un maquillaje natural con doble máscara de pestañas, como Cate Blanchett, o con ‘eyeliner’ como Alexa Chung.

Posiblemente el peinado menos ‘glamouroso’ es recoger media melena en una cola y dejar suelto el resto del pelo. Hecho de manera improvisada para retirar el pelo de la cara, que parece ser el caso de Laetitia Casta, puede tener cierto sentido, pero llevarlo de manera intencionada como Amy Adams, no es la opción más acertada para una alfombra roja.

Despejar la cara y dejar suelta la melena, se consigue con una diadema. Para conseguir un resultado ‘vintage’ y sofisticado, te aconsejamos cardar el pelo. Kristen Dunts ha optado por una cinta de raso y por dar volumen sólo en la zona de la nuca. Scarlett Johansson ha preferido darle cuerpo a todo su pelo y domarlo con una fina y sencilla diadema negra.

Dejamos para el final el peinado más divertido de la infancia, los coquitos. Miley Cyrus lleva dos, a modo de incipientes cuernos, sujetando su flequillo. Rihanna ha dividido toda su melena en mechones que ha retorcido hasta que se han enredado sobre sí mismos consiguiendo de este modo un ‘look’ más tribal.