Motera como Delevingne o de fiesta como Sarah Jessica: ¡combina la 'biker'!

El color negro y los acolchados a base de pespuntes romboidales son un clásico de las chaquetas moteras, con estos últimos se consigue dar un aire deportivo a esta prenda que puede transformar en ‘cool’ un sencillo vestido como el de Amanda Seyfried. La casa Burberry Prorsum copia el acolchado del muñeco de Michelín tanto en hombros y puños, la versión de Cara Delevingne, como en mangas, la que lleva sobre su vestido de gasa Rachel Bilson.

Pero la ‘biker’ también puede adoptar un aire angelical si cambiamos el negro por el blanco. La fotógrafa y ‘blogger’ Hanneli Mustaparta consigue un ‘look’ impoluto con la cara lavada, el pelo pulido y una indumentaria compuesta a base de diferentes texturas en blanco. La actriz Blake Lively hace una apuesta segura con el binomio blanco y negro, un clásico poco arriesgado pero muy elegante y que siempre funciona.

La tercera posibilidad en cuanto a color se convierte en infinita. Todo vale para una ‘perfecto’ de toda la vida, desde el rojo, otro clásico motero, de Nicole Ritchie, pasando por el turquesa de Alessandra Ambrosio hasta el amarillo de Kristen Stewart. Al tratarse de un patrón que cambia poco podemos ir acumulando en el armario diferentes tonos de chaquetas ‘biker’ adquiridas a lo largo de varias temporadas.

Respecto a la manera de combinar una ‘biker’, la más urbanita es la que incluye pantalones vaqueros pitillo y botines. Para un aspecto relajado bastará un jersey y la melena al viento, como Jessica Alba. Un estilismo más ‘chic’ es el de Rosie Huntington-Whiteley, con pelo recogido y bolso en piel de ante. Para ser la reina del asfalto bastará, como Miranda Kerr, con añadir un gran pañuelo de color al cuello.

Si optas por un ‘outfit’ más relajado, un vestido largo es la alternativa pues, da igual el color, un traje hasta los pies sigue teniendo connotaciones ‘hippies’, a menos que el tejido diga lo contrario. En blanco para mezclar con una ‘perfecto’ negra te dará un aspecto sobrio como el de Caroline de Maigret. Con uno negro con ‘biker’ de color, como la verde de Rihanna, conseguirás un ‘look’ más sofisticado. Un vestido veraniego de color como el elegido por Heidi Klum no es la opción más aconsejable por el exceso de contraste entre ambas prendas.

Conseguir un ‘look lady’ con la ‘chupa’ motera puede parecer imposible pero sólo hay que prestar atención al resto de la indumentaria. Alexa Chung elige una camisa que abrocha hasta el cuello, una falda evasé y zapatos de salón, además coloca la chaqueta sobre sus hombros, al más puro estilo años cincuenta. Kate Moss opta por acompañar su ‘biker’ con un práctico vestidito negro, mientras Kate Bosworth prefiere la siempre femenina falda lápiz.

En el otro extremo está el estilo ‘punky’, conseguido a base de imperdibles, tachuelas y remaches. Bárbara Martelo, estilista de Vogue España, elige una de las más icónicas, la “studded and safety pinned” de Balmain diseñada por Christoph Decarnin. Sienna Miller, en la gala del MET previa a la inauguración de la exposición más ‘punk’ del Metropólitan, optó por una ‘biker’ negra de Burberry Prorsum llena de pinchos.

Para un estilismo de noche impactante basta con mezclar sedas brillantes o transparentes gasas con una ‘perfecto’ de piel. Mónaco, baile de la rosa y una princesa vestida de Ralph Lauren: Charlene Wittstock y su ‘biker’ en tono crudo no dejaron indiferente a nadie. Una experta en estilismos como Sarah Jessica Parker ya probó esta mezcla con un Oscar de la Renta en rosa y chaqueta de Theysken Theory, aunque el impacto viene de la mano de Helen Mirren y sus Dolce & Gabbana: vestido de leopardo y ‘chupa’ de piel negra.

Pero ‘biker’ no es sólo la chaqueta, también se llaman así las botas moteras que también admiten estilismos varios. La perfecta pija, Olivia Palermo, las lleva con vaqueros y chaquetón de piel, en un patrón muy comedido. Más atrevido es el estilo de la modelo Freja Beja que las usa sin cordones, con pitillos y ‘biker’ de piel negra. La también modelo Sasha Pivovarova, en un alarde de excentricidad, hace asomar unos calcetines hasta la rodilla, un estilo más adecuado para el jardín que para el asfalto.