Las debilidades de Ana García Siñeriz: los calamares, el tanga y George Clooney

Ana García Siñeriz nos recibe en su casa al volver del trabajo, en plena mañana. Nadie diría que se ha levantado a las 2:30 de la madrugada viéndole lucir tan buena cara. Se somete a nuestro cuestionario con sentido del humor y cercanía, y escuchando sus respuestas da la sensación de que tiene su cabeza tan bien ordenada como debe tener su vida. Tanto que además de lo que le exige su horario de la tele (Matinal Cuatro) y la vida familiar, saca horas para escribir libros. Tiene calentido 'Esas mujeres rubias' (Planeta), una novela de esas que te pide el cuerpo en verano.

Fue una vez que me dijo un chico, ‘¡qué suerte debe tener tu marido!’, y yo pensé: ‘bueno, pues díselo a él’ porque los maridos ya sabes… normalmente no piensan que son los más afortunados.

Mi momento del día más divinity es cuando me meto en la cama porque estoy tan cansada que tengo unas ganas de dormir… Y el peor, aunque no sea la pregunta, es cuando me tengo que levantar.

Pues quizás, cuando nacieron mis dos hijos.

Lo más divinity de mi trabajo es decidir qué es noticia y contarlo de manera entretenida y sencilla a los espectadores.

Lo menos divinity de la vida es la pobreza, la enfermedad, la guerra… Todo esto que es una lacra y que ojalá algún día desaparezca.

Jejeje… Que es secreto y entonces puedes hacer lo que quieras y sólo se entera el otro. Eso es lo mejor de todo.

Pues cuando me pongo ordinaria, a limpiar y a sacar cosas y a guardar otras y… al final me da como casi un mareo del trabajo que te echas encima, pero luego te quedas muy a gusto.

Me encanta mi iPhone a pesar de que se queda colgado, tengo que decir. No es el 4, es el anterior y me ha salido rana. Y mi ordenador, no puedo vivir ya sin mi ordenador, que es un iBook, y sin mi teléfono tampoco. Reconozco que soy adicta. Hay gente que dice que hay hasta quien le da besos al teléfono y le pone nombres. Yo no llego a tanto pero de vez en cuando lo toco para comprobar que está ahí.

Mis webs de cabecera son Vertele, FormulaTV y El País. Miro siempre todos los resultados de televisión, las audiencias, las noticias que se producen en esas dos webs de televisión donde van todos los profesionales aunque no digan que lo hacen pero todo el mundo mira. Y en El País también porque, claro, como estamos haciendo un informativo por la mañana… De hecho, no sólo utilizo El País, utilizo muchísimas más, pero ésta es la web de referencia. Y luego miro muchísimas porque a las horas que hacemos los informativos, que empezamos a trabajar a las tres y media de la mañana, es lo único que funciona y donde encontramos mucha información. Miro webs extranjeras, YouTube también mucho… En fin, un poquito de todo.

Pues tengo un perfil porque una vez me metí y vi que había una que se había cogido mi nombre. No sé, sería mucha casualidad que nos llamáramos igual porque es un apellido un poco raro, García Siñeriz. Entonces yo me he cogido mi apellido entero, que es otro más, y lo que pasa es que no lo uso porque nada más apuntarme empezaron a llegarme peticiones de amigos, de hermanas y de amigos de amigos y dije esto es un trabajo que no puedo echarme a la espalda, que ya tengo bastante, y nada, tengo cuatro amigos y estoy invisible y es como si no existiera.

De ropa me gusta mucho Miu Miu y también me gusta Marni. Eso cuando me compro algo un poco mejor. Luego, como todo el mundo, también me encanta la ropa de Zara y de Mango.

Y de calzado, no me quito las havaianas en verano. Acabo en septiembre con los pies destrozados del polvo y de la calle. Y en invierno pues me da igual. Lo que pasa que me gustan mucho los zapatos de tacón pero casi nunca me los pongo ya si no es para trabajar porque he llevado ya zapatos de tacón tantos años que tengo las plantas de los pies destrozadas, y sueño con llevar zapato plano.

Pues no me acuerdo de alguien que odie, la verdad. No tengo muy buena memoria, pero además me cuesta hacer esfuerzos y recordar a alguien a quien deteste.

Te voy a decir dos hombres que me gustan: Felipe González y Don Draper, el de ‘Mad Men’.

Veo un poco de todo. Veo Cuatro, veo Telecinco, veo La Sexta, veo Antena 3, veo Digital Plus… Veo de todo.

Te voy a decir cosas que me divierten mucho y que me gustan. Pues por ejemplo veo ‘Tonterías las justas’, en Cuatro que me divierte mucho. En Telecinco, por las tardes de vez en cuando, veo el ‘Sálvame’ de Jorge Javier. Luego, en La Sexta, me parto con ‘Mujeres Ricas’ y me gusta mucho ‘Mad Men’, que es mi serie favorita. Y luego sobre todo lo que veo son películas en Digital Plus, que por las tardes cuando estoy descansando un poco después de comer me suelo ver una película al día y que me sienta de maravilla.

Guardo un sacapuntas de gatito, que está medio roto, desde que tenía no sé… nueva años. Me acuerdo que era de una compañera de mi clase, que lo tenía, se lo habían regalado, y a mí me parecía lo más bonito del mundo. Y entonces, no sé cómo, me hice con el sacapuntas de gatito. Supongo que sería de manera legal porque en esa época nos cambiábamos cosas, cosa que nos regañaban porque decían que no se cambiaban las cosas pero yo creo que me lo cambié con ella por algo, no sé por qué, y todavía tengo ese sacapuntas de gatito.

Me gustaría ser más ecológica de lo que soy, la verdad. Reciclo vidrio, reciclo papel porque me da mucha pena que no se reutilicen cosas como el papel. Me gustaría hacer más cosas, como hacer compost en la casa para utilizarlo pero no llego a tanto. Entonces, lo que sí que procuro es no malgastar. Es decir, ahorrarme estos gestos absurdos de desperdicio que tenemos: cierro el grifo cuando me lavo los dientes, procuro no tirarme tres horas en las ducha, si me lavo el pelo cierro el grifo mientras me enjabono, nunca pongo aire acondicionado porque no me gusta y además creo que si hace calor, pues hace calor, y abres las ventanas y te refrescas… Procuro tener más que una conducta muy ecológica, una conducta sensata de cara al medio ambiente.

Los toros me fascina lo que se la puesta en escena: los colores, la plaza de toros, el grana, el albero, los trajes… Pero a mí no me gustan los toros, no me gusta la muerte de un animal, no me gusta que sea un espectáculo la muerte de un animal. Yo no sé si nuestro país está preparado para prohibir las corridas, yo no iría tan lejos, pero conmigo que no cuenten. Sin ponerme muy radical en el tema, no es lo mío.

Ninguno, debería practicar deporte, pero siempre he sido una vaga con el deporte. Soy muy mala deportista, toda la vida esforzándome por hacer, por esquiar, por jugar al tenis, por hacer Pilates, por hacer gimnasia… Y es que en el fondo no me gusta nada hacer deporte, no me gusta. Lo veo por la tele y me gusta, pero hacerlo yo, no. Entonces… en septiembre vuelvo a empezar, vuelvo a hacer algo.

Duermo menos de lo que me gustaría. Yo necesito para estar a pleno rendimiento ocho horas y ahora mismo con el trabajo que tengo, que me levanto a las dos y media de la mañana, debería acostarme en plan radical… a las seis y media ya debería estar durmiendo y nunca estoy durmiendo a las seis y media. Como mucho me meto en la cama a las siete o siete y media y acabo durmiendo seis horas y media.

Sueño con dormir más. Me gustaría dormir mucho. Y yo sueño como mucha gente con no trabajar y con estar dedicándome a lo que me gusta, pero por ahora no puede ser.

Pienso… ¡Mierda! A veces pienso que se ha equivocado, que estamos a sábado y que me he olvidado dejándome el despertador puesto, pero luego me doy cuenta de que me he equivocado, de que es martes y todavía queda casi toda la semana por delante. Es horrible.

A mí la que más me gusta es cuando mis hijos dicen ‘mamá te quiero’ o ‘mamá te adoro’, que ya es el colmo. Pero los niños tienen frases geniales continuamente, geniales.

Me gusta el olor de la piel de los niños y de la piel de la gente que amas.

El olor a animal muerto. No sé debo tener algo por ahí pero este olor que de repente vas por el campo y notas que hay un animal en descomposición, me produce… ‘agg’. Me da mucho asco.

- Para ellas: tacones, tanga y maquillaje

Pues sí. Definitivamente sí a los tacones, al tanga y al maquillaje porque… va en gustos, pero yo creo que ya pasó el tiempo de las bragas éstas, con las gomas, que todo el mundo iba haciendo ‘plas, plas’ para que no se notaran y el tanga ha hecho mucho bien, a pesar de que tengo amigas que señalan que no es una prenda muy cómoda, pero nos ahorra esas antiestéticas marcas. Y luego el maquillaje, con medida, evidentemente, cuantos más años, menos maquillaje… Y los tacones, por supuesto, para estar estupenda porque te cambian hasta la manera de sentirte.

- Para ellos: barba, tinte y camiseta de tirantes

Barba, sí. Yo creo que los hombres con barba están muy guapos, la mayoría. Lo que pasa que luego se las quitan y a veces están más guapos todavía. Y luego hay otros que no, que mejor que se dejen la barba. A mí la barba me gusta.

Tinte… ¡Nunca! Tinte en el pelo de un hombre es imperdonable, aunque no se note. Las canas a mí me gustan, incluso en las mujeres. Yo me las hubiera dejado si no fuera porque mis peluqueras me lo impiden.

¿Camiseta de tirantes? No, no, o sea, no.

Lo voy a decir pero espero que no vaya mucha gente. Bueno, algunos si quieren que vayan porque les va a encantar: Lamu, en Kenia. Es una maravilla.

Buff… Tres meses. En verano. Un mes en Formentera, otro mes en Madrid y otro mes viajando por ahí… Pero son tan divinitys que no las he podido disfrutar nunca.

Tengo dos libros, de alguna manera relacionados conmigo. Uno se llama ‘Saga’, de Tonino Benacquista. Está en Lengua de Trapo. Me gusta mucho, me gustó siempre pero ahora me gusta más. Es la historia de un grupo de guionistas que cada uno viene de su padre y de su madre, a los que unos directivos de televisión les ponen como condición que, para hacer el programa que tienen que hacer, es gastarse lo menos posible. Entonces hacen un programa de madrugada, casi como nosotros, y un programa que al final se convierte en un gran éxito de audiencia porque hacen una serie de televisión tan completamente alocada, que a la gente le encanta. Y luego yo recomendaría humildemente el mío, que lo he sacado hace muy poco, se llama ‘Esas mujeres rubias’, no llega a las alturas de Tonino Benacquista, pero yo creo que los buenos lectores sabrán encontrar algo interesante.

‘Dos en la carretera’, de Stanley Donen. Tiene todo. Tiene a Audrey Hepburn, tiene a Albert Finney, tiene un guión maravilloso, tiene humor, tiene cosas tristes, tiene escenarios increíbles, tiene los trajes de Givenchy… Es una historia en la que todos nos podemos ver reflejados y es maravilloso.

Vamos a poner una de Elton John que se llama ‘Your song’ y que también es muy bonita. Dice que el mundo es mejor desde que tú estás en él.

Casa Fidel en Madrid, que tiene unos menús muy bien de precio, la comida es buenísima, las croquetas son como las de la madre de cualquiera y se come fenomenal. Me gusta mucho.

Los calamares en su tinta de mi madre. Son espectaculares.

Es que yo ya no voy a bares… Hace mucho que no voy a bares. Pero vamos a decir, el ‘Blue Bar’ (), en Formentera.

Me lo voy a callar porque ya va demasiada gente. Así que me voy a apuntar al que dijo Santi Millán, el Escribá, en Barcelona, que me encanta y además sus patatas bravas son también buenísimas.

La caipiroska. Los mojitos me sientan fatal, pero me encantan.

No hace tanto. Fue un mojito que me sentó mal.

Creo que voy a tener que dejarla sin respuesta. Pero bueno, por soñar que no quede… George Clooney.