Fue en noviembre de 2013 cuando Sergio Ramos y Pilar Rubio anunciaron que iban a ser padres de su primer hijo en común. "Queremos compartir con vosotros nuestra felicidad en este momento tan importante, vamos a ser padres", escribieron entonces en un tweet que compartió el futbolista. Unos meses más tarde, el 7 de mayo de 2014, nacía Sergio Jr. "Tanto mi mujer, Pilar Rubio, como yo, queremos compartir con vosotros la inmensa alegría que sentimos con el nacimiento de nuestro primer hijo, Sergio Ramos Rubio", anunciaron en aquel momento.

Como después hicieron con los tres hijos más que han tenido, Sergio y Pilar siempre han mantenido en secreto el nombre de sus bebés. "Ha nacido por parto natural a las 19:43 horas y ha pesado 3,2 kg. Tanto el niño como ella se encuentran en perfecto estado. Esto nos llena de felicidad y estamos muy contentos de que todo haya salido perfectamente", comentó el futbolista públicamente tras ser padres primerizos.

Once años han pasado desde entonces y Pilar, a través de su cuenta de Instagram, ha compartido una fotografía con su hijo mayor y ha hablado como nunca de su personalidad.

Evitando mostrar el rostro del menor, Pilar Rubio ha compartido una fotografía junto a su hijo antes e soplar las velas. "Once años de amor incondicional", ha comenzado diciendo. Al mayor de sus cuatro hijos le define como un "pequeño gran hombre" que es "luz, alegría y corazón". "Verte crecer es el regalo más bonito que me ha dado la vida. Gracias por enseñarme tanto cada día. Te amo con toda mi alma, mi campeón", ha dicho en su carta pública.

La presentadora hace una mención en su carta pública a Sergio Ramos, que se encuentra viviendo en Monterrey, México, por el contrato con su nuevo equipo de fútbol. La propia Pilar contaba hace unos días que están haciendo viajes siempre que pueden para pasar tiempo con su marido y que, de momento, para ellos no está siendo un problema la distancia. "Viajo con los niños y hago deberes en el avión. Llegué ayer por la mañana. Me tendrían que hacer club diamante ya de tantos vuelos. Es tiempo aprovechado, para mí no es ningún problema", comentaba hace unos días, justo después de regresar de Monterrey.

"Todo se puede llevar si hay amor, respeto y comprensión. Es experiencia. He estado toda la semana santa allí con los niños. Hemos aprovechado para viajar por Monterrey, para que los niños culturalmente se abran y aprendan, vean otro tipo de vida. Para mí es una suerte que podamos tener esas dos vidas, no lo veo como un drama", decía sobre esta nueva etapa de sus vidas.

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