Raquel Meroño se sincera sobre el problema de aprendizaje de sus hijas: "Es hereditario"
Daniela y Martina, que cumplieron 18 años el pasado mes de noviembre, se han graduado y su carrera como creadoras de contenido está despegando
Raquel Meroño confiesa su truco para 'controlar' con quién se relacionan sus hijas adolescentes
Hace una semana, Daniela y Martina, las hijas de Raquel Meroño cerraban una etapa importante de sus vidas. Las dos hermanas, que son mellizas, se graduaban en el instituto ante la atenta mirada de sus padres, que compartían en sus redes sociales su emoción ante el logro de sus hijas. Se cierra una etapa y nacen oficialmente dos mujercitas. Ha sido un camino intenso, lleno de amor, aprendizajes y piedras en el camino aunque no se vean en las redes", escribía la actriz en su perfil de Instagram, donde compartía un precioso vídeo de la graduación. Un día muy especial que toda la familia vivió con muchísima intensidad y emoción.
Han pasado ya siete días y Raquel Meroño sigue con resaca emocional por todo lo vivido y por lo que supone. Sus hijas empiezan a volar solas y tras terminar el instituto se enfrentan a nuevos retos. Pero mientras ese momento llega, ahora toca seguir celebrando con entusiasmo el logro conseguido. "La verdad es que ha sido muy emocionante porque es realmente el cambio de una etapa a otra. Parecía que habían ganado el premio Nobel de la Paz de cómo la celebramos. Un poco exagerado, pero bueno. Los americanos son así y nosotras también somos muy de celebrar", ha comentado la actriz a los compañeros de Europa Press sobre la graduación de Daniela y Martina.
El problema de aprendizaje de Daniela y Martina
Detrás de esa celebración tan a la americana y por todo lo alto se esconde un importante motivo. Un problema de aprendizaje del que Raquel Meroño no ha hablado nunca. "Hay cosas que no salen en las redes, pero yo sí sentí mucho orgullo porque sé que ha habido algunas dificultades de las que nos hemos tenido que hacer cargo y bueno, las han ido superando y estoy muy orgullosa y ellas también", ha comenzado diciendo en las citadas declaraciones a los compañeros de la prensa.
Según ha explicado la actriz sus hijas tienen dislexia y han tenido que recibir ayuda de especialistas que les facilitaran métodos de enseñanza específicos y apoyo. "Yo también he sido un poco disléxica y eso parece ser que es hereditario y durante unos añitos tuvieron que estar ahí con logopedas y trabajando duro", ha explicado la actriz. "Hay grados de dislexia muchísimo más profundos, pero sí es verdad que necesitaron un poquito de ayuda".
El tierno recuerdo de Daniela a su abuelo durante su graduación
Pero además del apoyo extraescolar con especialistas, Daniela y Martina tuvieron un apoyo muy importante durante sus primeros años de colegio. Según ha explicado Raquel, su padre (el abuelo de las adolescentes) estuvo muy pendiente de ellas y se volcó en ayudarlas. "Estuvieron durante varios años yendo todas las tardes con su abuelo, porque él fue el que cada día estuvo con ellas estudiando y ayudándolas a superar todos esos obstáculos", ha contado la actriz sobre su progenitor, que falleció hace dos años.
Estuvo muy presente en la vida de sus nietas, que además de rendirle homenaje llevando su apellido de primero, en lugar de Carbones, le tuvieron muy presente el día de su graduación. De hecho "Daniela llevaba la foto del abuelo en la mano cuando recibió el diploma", ha contado muy emocionada la actriz.
Muy orgullosa del camino que se están labrando
Desde que cumplieran 18 años, Daniela y Martina se han enfocado en las redes sociales y su carrera como creadoras de contenido ha despegado. En los últimos meses ambas han logrado una importante repercusión. "Están felices, yo también, de verlas disfrutar", decía hace unas semanas Raquel Meroño, que también aseguraba que hay mucho trabajo detrás de lo que hacen y mucha creatividad.
Pero más allá de ese éxito y esa popularidad que han alcanzado, su incipiente carrera les está permitiendo también empezar a ganar su propio dinero y con ello, independencia. Llegando incluso a poder costearse sus estudios. Un logro del que su madre se siente profundamente orgullosa. "Yo no le he pedido un duro a mis padres jamás para absolutamente nada, entonces que mis hijas estén siguiendo el mismo camino de ganarse su propio dinerito, pues mola mucho. Con 18 años están pagándose sus gastos y ahora se van a pagar su carrera, a mí me parece que es para estar muy orgullosa de ellas. Han estado trabajando y estudiando al mismo tiempo y no hay tantos jóvenes que hagan eso a tan temprana edad", ha terminado diciendo la actriz sobre sus dos hijas.