Antonia se ha hecho eco de una instantánea que su sobrinísimo ya había compartido para dar las buenas noches a sus followers, y con la que hizo enloquecer a una gran mayoría. Esto de compartir fotos de su sobrino es un gesto más que habitual en su tía ya que presume bastante a menudo de él en sus redes sociales.

Esta foto compartida por ambos es tan solo un adelanto de lo que Carlos 'regala' a sus más de 12 millones de seguidores en Instagram. Entre desfile y desfile, gasta su tiempo en viajes, mucho posado subido de tono, momentos con su perro, nada de comilonas sino todo muy healthy, y fiestones.

Vida social aparte, el modelo también tiene tiempo para cuidar ese cuerpo que enseña en la red social y que trabaja a golpe de puñetazo en sus clases de boxeo. "Back in the game!" (volver a la cancha). Con esta frase dio la bienvenida en septiembre a sus clases de core y hit a las que dedica gran parte de su tiempo libre.

Y como todo instagramer preciado no pueden faltar en su perfil las fotos frente al espejo, en playas paradisiacas -de las que deducimos que le encanta disfrutar del mar ya que inundan su perfil-, de las alas de los aviones en los que vuelay la más reveladora de todas -al no faltar en ninguna cuenta celeb-: Carlos de pequeño para autofelicitarse por su 23+1 cumpleaños.

De Canarias, su tierra natal, viajó a Madrid a probar suerte como modelo y no le fue nada mal al compaginar su trabajo como dependiente en una tienda de moda con sus primeros pinitos en la industria fashion. Después se mudó a Londres y vinieron rodados los editoriales de moda, portadas y varias campañas publicitarias con firmas de prestigio como Mango, Unique o la firma australiana Marcus, especializada en moda de baño. Desde que saltara a la fama en 2014, su éxito ha crecido como la espuma, aunque todo no ha sido un camino de rosas, tal y como reconocía en una entrevista. "Soy consciente que el camino es duro para llegar a lo más alto pero lucho por ello cada día".