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La colaboración de Shakira con Bizarrap da para unos cuantos análisis morfológicos. Y sintácticos. Y lo que haga falta. Porque, aunque llevábamos días prevenidos de que lo que estaba por venir era un bombazo, cualquier expectativa era ínfima comparada con el resultado final. 3:33 minutos de canción (justo el número de la camiseta de Gerard Piqué, qué casualidad) en los que la colombiana va con todo para retratar al que ha sido el padre de sus hijos.
Le reprocha que diese su "peor versión" cuando más le necesitaba. Le invita a trabajar más el cerebro y menos el bíceps. Reivindica que ella "clara-mente" vale más que "dos de 22". Y le echa en cara que le dejase "de vecina a la suegra, con la prensa en la puerta y la deuda en Hacienda". Una frase que canta después de pedirle perdón por que su música le "sal-pique" y que merece un desarrollo a parte.
En la Bzrp Music Sessions, Vol. 53, quizá el tema de Bizarrap cuyo lanzamiento ha tenido más ojos encima, Shakira mete a Montserrat Bernabeu a capón en la compleja trama legal, emocional y profesional que ha resultado de la abrupta ruptura entre su hijo y ella. La potencia mediática de la ya expareja era tal que sus respectivos padres ocupaban un rol casi invisible de cara a la prensa. Y esto ha sido así hasta que su exnuera ha decidido introducirla en la letra de su último hit.
Desde que iniciaron su noviazgo hace ya doce años, cuando él acababa de ser campeón del mundo con La Roja y ella lo petaba con su 'Waka Waka', todo parecía paz y armonía en la relación de las familias Piqué-Mebarak. Especialmente entre la artista y su "suegrita", como se refería a ella cariñosamente. Basta con tirar de archivo para rescatar los centenares de fotos en las que los paparazzis las han inmortalizado compartiendo momentos de complicidad a lo largo de esta última década.
Con el nacimiento de Milan, el primogénito de Gerard y Shakira, el vínculo se estrechó aún más. Montserrat tomó el puesto de abuela con ilusión y absoluta dedicación. Incluso decidió instalarse junto a Joan, su marido y padre de Piqué, en una casa anexa a la de su hijo y su nuera. De ahí lo de "vecinas" de la exclusiva Ciutat Diagional, ubicada en Esplugues de Llobregat, una de las zonas favoritas de los vips que residen en Barcelona.
Esta en su momento les pareció una idea redonda. Con las complicadas agendas del futbolista y la artista, tener a los abuelos paternos de Milan y Sasha pared con pared era una opción práctica que ahora, con él viviendo con Clara Chía en su ático de soltero de la calle Muntaner, a varios kilómetros de distancia, y con ella deseando empezar una nueva vida en Miami, tener a la suegra tan (tan) cerca ha pasado a ser un problema.
Ahora, después de escuchar la última sesión de Bizarrap, será difícil que Monserrat Bernabeu conceda declaraciones como estas que dio para un medio colombiano hace varios años: "Shakira es una persona espectacular, una mujer sencilla y de grandes valores que además resulta ser la segunda mujer más importante del mundo del espectáculo. Yo la encuentro una persona fascinante".
Aunque de aquella estuviese poniendo en valor la trayectoria de su nuera, la de Montserrat tampoco se queda atrás. Y es que, a pesar de que la medicina no tenga tanto escaparate como la carrera de una estrella del pop, esta licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad de Barcelona que se especializó en Medicina Física y Rehabilitación es una de las doctoras más prestigiosas de la ciudad condal.
En su currículum encontramos grandes hitos: ser presidenta de la Sociedad Española de Neurorrehabilitación (SENR), formar parte de la Junta Directiva de la International Society of Physical and Rehabilitation Medicine (ISPRM) o trabajar en el Institut Guttmann como jefa de la Unidad de Daño Cerebral y como directora asistencial. En estos momentos Montserrat está volcada en sus labores de codirectora de la fundación con la que cuenta este centro médico de referencia mundial.
La madre de Gerard no es la única que tenía una cierta proyección por su desempeño profesional, antes de la inesperada alusión en el tema de su exnuera. El patriarca de la familia, Joan Piqué, padre del futbolista y de su hermano pequeño Marc, es abogado, pero ha tenido cierta presencia pública debido a su labor como escritor. Son dos las novelas que ha publicado hasta la fecha, 'Dues vides' y 'Fantasmes del passat', ambas de intriga.
Su vertiente como novelista es, además, un punto en común con el que fuera su consuegro, William Meberak Chadid, padre de Shakira, que trabajó como periodista y escritor. El futbolista ha confesado admirar mucho esta vertiente literaria de su progenitor, a quien acompañó, junto a Shakira, en la presentación de uno de sus libros en 2013. Curiosamente, Además, Joan cultiva otra faceta como empresario, al participar en muchos de los proyectos de su hijo