Anna Kournikova exhibe lo grande que está su hija y todos hablan de sus ojos: "Es igual que Enrique Iglesias"

  • Anna Kournikova muestra lo mucho que ha crecido su hija en común con Enrique Iglesias

Su primer embarazo fue llevado con la máxima discreción. No existían fotos de Anna Kournikova con tripa premamá cuando nacieron los mellizos Lucy y Nicholas. Hasta que su maternidad se convirtió en un secreto a voces. Con el nacimiento de Mary, la tercera, a la que trajo al mundo hace ocho meses, la gestión de su vida privada fue diferente. El día del parto, tanto ella como Enrique Iglesias decidieron compartir con sus fans, que no son pocos, los instantes posteriores a conocer a la pequeña. Y ahora, ocho meses después, parece que está claro qué ha heredado de papá y de mamá.

Hacía seis meses que no veíamos el rostro de la menor. Y el impacto de ver tan grande a la pequeña de la casa ha generado un consecuente revuelo en el feed de Instagram de la tenista de élite. Enrique Iglesias, padre de la criatura, ha sido de los primeros en mostrar su amor infinito por Mary. "Mi corazón", le ha dedicado junto a un emoji. Desde Miami, la nieta de Julio Iglesias ha recibido mensajes de sus hermanas Victoria y Cristina, que han dicho de ella que es un "ángel" y que está "demasiado preciosa". Además, la segunda ha abierto un debate y ha definido a su sobrina como "la gemela” de Kournikova, haciendo referencia a su evidente parecido físico.

Sin embargo, no todos los fans de la familia piensan lo mismo. Son muchos los usuarios anónimos que han apuntado a que los ojazos de Mary Iglesias Kournikova son clavaditos a los de su padre: "Es igual que él". Un vínculo con Enrique que se complementaría por el prometedor mensaje que ha adjuntado su madre junto a este tierno posado: "Wimbledon, allá vamos". ¿Seguirá los pasos de la campeona del mundo y se dedicará en un futuro al deporte de élite?

La estupenda relación de Tamara Falcó con su cuñado Fernando Verdasco

Un confinamiento puede unir mucho. Y parece que eso es lo que ha sucedido con Tamara Falcó y Fernando Verdasco. Cuando se declaró el estado de alarma, el tenista y su mujer Ana Boyer decidieron instalarse en Villa Meona, la icónica mansión ubicada en Puerta de Hierro en la que reside históricamente Isabel Preysler, la matriarca de clan. Allí disfrutaron de tres meses de encierro junto a la socialité, Mario Vargas Llosa y la hija del difunto Marqués de Griñón.

Fueron pocas pero claves las fotos que esta última compartió disfrutando de Miguel, el primer hijo de su hermana pequeña. Y su último post de Instagram nos ha demostrado que no solo está encantada de compartir espacio con su ahijado, también con su cuñado. "Hay momentos que solo puede capturar la family", le dedicaba hace unos días.