Jaime de Marichalar defiende como nunca a sus hijos: "El 90% de lo que se dice de ellos es mentira”

La fama de Froilán ("Pipe", como le dicen sus amigos, o "Felipe", como le llama su padre) siempre ha sido una losa. Desde pequeño se le tildó del "garbanzo negro" de Casa Real. Pero quizá estábamos confundidos en eso de poner etiquetas a los nietos mayores de don Juan Carlos. “Victoria también sale y se divierte como Felipe, pero es mujer y más lista, y no se la ve tanto como a su hermano. Yo prefiero que Felipe sea así como es, un buen chico, espabilado, y que disfrute”, ha contado Jaime de Marichalar a ¡Hola! durante el almuerzo del XXXI Premio de Poesía Loewe.

En cuanto a los caminos profesionales de sus hijos, no son tan distintos como muchos pensábamos. Felipe se estrenó en la universidad hace un par de años. Y Victoria Federica, que hace relativamente poco cumplió la mayoría de edad, seguirá sus pasos. "Va a estudiar ADE, que es la carrera que también estudia Felipe". Con un apunte con mucha enjundia: "Por cierto, que mi hijo está sacando su curso, está muy centrado y le va muy bien en su carrera". Dardo directo que demuestra que lo de sacar malas notas y tripitir es cosa del pasado.

Siempre se han hecho muchas comparaciones con respecto a los hijos de la infanta Elena. “Felipe es igual que su madre y Victoria ha salido a mi familia. Mi niña me recuerda mucho a mi madre, que era una mujer muy elegante, con mucho estilo como Victoria”. La moda ha sido un punto que, de unos meses para acá, ha destacado en las conversaciones en torno a Federica. En Divinity.es, de hecho, tenemos unos aciertos y errores que desgranan los pros y contras del estilo de esta influencer 'royal'.

Esta foto encendió las alarmas:

Era la primera vez que la vida privada de Victoria Federica salía a la luz. Desde entonces, su amor por el torero Gonzalo Caballero ya es un hecho. El íntimo amigo de Froilán y la hija de Jaime de Marichalar y Elena de Borbón son una pareja oficial que ya cuenta con la presión de los paparazzis. Su primer abrazo público, sus declaraciones de amor recíprocas... Todo ha ido convirtiendo a Victoria Federica en un celebrity 'per se'.