Alejandra, la hija de Fedra Lorente y Miguel Morales: 30 años, muy unida a sus padres y trabaja tras las cámaras

La actualidad del papel cuché en estos últimos días pasa, entre otros, por un nombre propio: el de Fedra Lorente. La revista Semana publicó este miércoles en los quioscos una entrevista con la popular actriz, conocida por sus papeles en distintas ficciones patrias y por su rol de 'La Bombi' en el 'Un, dos, tres...', que ha puesto sobre la mesa la complicada situación económica que atraviesa. Ella misma ha confirmado que tiene las cuentas bancarias vacías y llenas de deudas y que ha tenido que recurrir a Cáritas. La propia artista ha calificado su momento actual como "vulnerable" a la mencionada publicación.

La trama lleva desde entonces ocupando buena parte del debate en la prensa del corazón. Lorente, finalmente, se sienta esta noche en '¡De viernes!' para dar todos los detalles sobre lo que está ocurriendo, apuntando la periodista Mónika Vergara, quien la entrevistó para Semana, que el origen de todo se remonta a hace algo más de un año cuando su marido, Miguel Morales, estaba trabajando e ingresando dinero "pero no llegaba" y que la propia Fedra "dice claramente que es una estafa". La noticia llega, además, en un contexto difícil en lo personal para ella: se destapó poco antes de la muerte, este pasado septiembre, de su pareja, músico y hermano de Júnior, con quien tuvo a su única hija, Alejandra Morales.

Alejandra, la única hija de Fedra Lorente, que adoptó en Colombia

Durante medio siglo se prolongó la historia de amor entre Fedra y Miguel, que se casaron en 1975. Ambos quisieron formar una familia, pero tuvieron problemas para conseguirlo de forma biológica, como narró Lorente en una entrevista al diario ABC, revelando que llegó a sufrir tres abortos. A finales de la década de los noventa, cuando ya llevaban veinte años de matrimonio, decidieron adoptar a una niña en Colombia. Se trata de Alejandra, a quien los suyos se refieren también cariñosamente como Álex; desde que la vieron, sintieron que era parte de su vida.

El trabajo de Alejandra Morales, la hija de Fedra Lorente

Alejandra Morales tiene actualmente treinta años y prefiere mantenerse en un segundo plano pese a la gran proyección pública que han tenido siempre sus dos progenitores debido a sus respectivas carreras artísticas. Lo cierto, no obstante, es que sigue los pasos de ambos en este ámbito, aunque desde otra perspectiva, sin ponerse delante de las cámaras, a diferencia de ellos. Hace y escribe guiones para producciones y, según su madre, está contenta con el trabajo tras las cámaras, sintiendo, además, pasión por la música y la interpretación, que le inculcaron sus padres.

La relación de Alejandra con su madre, Fedra Lorente y su padre, Miguel Morales

Con ellos ha tenido una relación muy estrecha siempre. Sus redes sociales, o las de su madre, han dado buena cuenta de ello, siendo habituales los posados familiares y las escenas cotidianas y domésticas entre sus publicaciones. La pérdida de su padre fue un duro varapalo, y Alejandra le dedicó una carta emotiva entonces: "Mi corazón se rompe en mil pedazos, porque te has ido, mi mejor amigo, mi compañero de juegos y mi cómplice de tonterías. ¿Qué voy a hacer ahora sin ti?", se sinceraba entonces sobre su pérdida, recordándole que tienen una cita todas las noches: "Te veré en mis sueños hasta que llegue el momento de volver a abrazarte", le prometía.

La unión es también muy fuerte con otros miembros de su familia, como sus primas Carmen Morales y Shaila Dúrcal. También, por supuesto, con su madre, con la que celebraba su trigésimo cumpleaños hace solo unas semanas, y con la que ha cruzado también palabras e imágenes de forma frecuente. Fedra ha dicho de ella públicamente que es "la razón" de su sonrisa, ha asegurado que es muy "dicharachera", así como ha reconocido que la joven "compartía más" con su marido que con ella. En Instagram, además, Alejandra se define, también, como "mamá de cuatro patitas", en referencia a su querido gatito, Fai.