Mariah Carey se monta una sesión de fotos de visita en el hospital
Lo de Mariah Carey es muy fuerte.
La cantante norteamericana es una diva de la escena allá donde va y da igual que esté de compras en el supermercado, en la ventanilla de Hacienda o de visita en el hospital.
La última foto que la cantante ha colgado en su página web mientras cuidaba a su marido, que ha tenido que ser ingresado de urgencia por un problema renal, así lo evidencia.
La instantánea no tiene desperdicio. En ella vemos a Mariah metida en la camilla del centro clínico junto a su esposo mientras, amorosa como pocas, le ofrece una bebida que a buen seguro le alivia los dolores.
Su gesto, su pose y su intención despiertan, cuanto menos, una sonrisa. “Intentaron echarme del hospital”, confiesa la cantante en su página web. Ya nos imaginamos a la jefa de planta echa una basilisca cuando vio a la Carey metida en la camilla de su esposo.
El cuadro de la foto evidencia que no se trata de un montaje y que, efectivamente, su esposo está hospitalizado. Ese neceser abierto al lado de la botellita de agua, la crema hidratante y el mando de la tele; la iluminación de la escena y el gotero y el tensiómetro así lo evidencian.
A pesar de que aún no ha trascendido el diagnóstico de Nick Cannon, el esposo de Mariah, la cantante ha pedido a sus fans que lo tengan en sus plegarias “porque está pasando mucho dolor”. Cannon, por su parte, ha agradecido el interés mostrado en Twitter: “Gracias por todo vuestro amor, plegarias y procupación. Ya me conocéis, me pondré bien”. El ataque renal sorprendió a la pareja en Aspen, donde pasaba unos días de vacaciones esquiando junto a sus gemelos recién nacidos.
La fotografía de Carey de visita en el Hospital no es otro ejemplo más de las grandes imágenes que la cantanta regala al mundo cada cierto tiempo. Si como dice Mario Vaquerizo saber posar es una arte, Mariah Carey es sin duda la Leonardo Da Vinci de la foto hecha con teléfono móvil. Para el recuerdo quedan aquella foto que Mariah se hizo junto a un vagabundo como si fuese a ser la nueva portada de su disco o la imagen que colgó en Twitter mientras paseaba a sus perros en chandal como si estuviese haciendo un editorial de moda para Vogue vestida de Dior.