La consuegra que imita a Tita y el misterio del bautizo de Eric

SILVIA GRIJALBA 01/11/2010 19:33

En este blog las versiones oficiales nos importan tirando a poco. Lo que nos interesa es el off, la parte menos evidente y, en muchos casos, las migajas. Sí, los restos de serie. Un ejemplo clarísimo de ello ha sido la página que la revista Pronto ha dedicado al bautizo del año, el de Eric, el vástago de Blanca Cuesta y Borja Thyssen.

Sí, la noticia ya la dio en exclusiva la semana pasada la revista oficial de la familia Thyssen, el Hola, pero varios días después Pronto también se ha hecho eco para esos lectores que les prefieren a ellos. Y, desde luego, sacan mucho más jugo al acto.

Mi foto favorita del reportaje gráfico es la de Heidi, la madre de Blanca, suegra de Borja y consuegra de Tita. Esa señora anteriormente era el prototipo de “sueca” (nos da igual que sea alemana u holandesa, la Sueca es la Sueca, si no que se lo digan a Landa) que estuvo imponente (póngase la voz de López Vázquez en Atraco a las Tres) y que con los años pues tiene cierto estilo y sigue siendo guapa. En la actualidad y, a juzgar por la foto de Pronto, Heidi se ha convertido en la típica española que quiere parecer Sueca, algo que en la generación de las mujeres que ahora rondan los 60 años ocurre mucho y Tita Cervera no es una excepción. Y es que Heidi intenta imitar claramente el estilo de Tita. De hecho, si no supiéramos por el subtítulo de la noticia que Tita no asistió y que “no conoce a su segundo nieto” (esto es textual, pero debería decir “no reconoce”), pensaríamos que esa señora medio rubia y con expresión desencajada es la baronesa. Heidi ha conseguido una imitación casi perfecta y miren que es difícil. Porque imitar a pongamos la Duquesa de Feria es fácil. Una se viste de Valentino y va impecablemente peinada y listo. Pero la Thyssen es más complicado. Conseguir ese despeine que sólo ella, con sus propias manos, consigue configurar, es una labor ímproba. Pero Heidi lo ha conseguido, va igual de mal peinada y no se da cuenta de que, en el fondo, Tita querría ser “sueca” como ella.

El bautizo, según Pronto, fue bastante bien, aunque, claro, estuvo deslucida por esa ausencia a medias de la baronesa. Pero los chicos estaban contentos porque, como bien reza un ladillo del reportaje, hubo “numerosos amigos entre los invitados”. El destacado nos deja intrigados. Hombre, en cualquier boda o bautizo e incluso comunión lo normal es que los invitados sean amigos. ¿Por qué ponen énfasis en este dato? Los de Pronto saben algo que nosotros ignoramos… o quizá sea cosa del protocolo y los herederos de la aristocracia no invitan a sus amigos a las fiestas sino a sus enemigos. Pero no, no, casa porque entonces hubiera tenido que ir Tita y el bautizo hubiera sido multitudinario. Seguiremos investigando, en cualquier caso, según la revista, los presuntos amigos son Darek y la Uribarri, no nos muestran más. Numerosos no son, pero seguro que tienen una amistad a prueba de bomba.