Igual que en las pelis. Charlie Sheen estaba plácidamente en su casa (o eso suponemos) cuando de repente alguien llegó a su casa. Era la Policía. Y no, su llegada al 'barrio' del actor no estuvo motivada por una de sus sonadas fiestas. Al parecer se había visto un hombre sospechoso en los alrededores de su masión, que posteriormente fue detenido. La noche no terminó ahí. Después del arresto, la Policía invadió la casa de Sheen "por presunta violación de la orden de restricción temporal", explicó el abogado del actor, Mark Gross. Más tarde éste reveló que los agentes confiscaron un rifle de 1800 y "unas pocas balas" del domicilio. Las cámaras de ETonline captaron el momento.