Jaime de Marichalar, poseído por Carrie Bradshaw

divinity.es 30/06/2010 11:30

Jaime de Marichalar ha sido un gran desconocido desde siempre. Ni a raíz de su boda con la Infanta Elena se dejó entrever cómo es él en realidad. Y lo curioso es que lo poco que se ha sabido de él es su pasión por la moda. Siempre se ha comentado que fue él el que instruyó en estilismos a doña Elena de Borbón pero él nunca ha hablado abiertamente sobre su condición. Su condición de experto de moda, claro.

Este fin de semana estuvo en el último desfile de Dior acompañado, ni más ni menos que, por Karl Lagerfeld. Los dos compartieron gestos de complicidad y charlaron animadamente sobre lo que paseaba por la pasarela. Jaime, con un cruce de piernas muy masculino, escuchó atentamente a lo que el gurú de Chanel comentaba. Había más estilo en esas butacas que en toda la hemeroteca de 'Vogue Italia'.

Durante el desfile, Marichalar estuvo atento para no perder ni un solo detalle de las últimas tendencias, igual que si fuese el corresponsal enviado por alguna prestigiosa cabecera de moda. En cuanto le gustaba algo se giraba delicadamente para cambiar opiniones con Helene Arnault, esposa de Bernard Arnault, presidente del macro-grupo de moda LVMH, que cobija grandes marcas como Christian Dior y Louis Vuitton. Jaime tiene amistades influyentes en el panorama internacional.

Marichalar es asiduo a este tipo de eventos, no es raro verle en Pasarela Cibeles o en cualquier presentación de moda. A estos eventos suele acudir con sus amigas, entre las que destacan grandes personalidades como Cari Lapique o Carmen Martínez Bordiú. Hace bien poquito se les pudo ver a todos en armonía disfrutando de una corrida de toros. Ellas parecen encantadas de tener un amigo tan sensible que les pueda recomendar estilismos, peinados, cremas y todo tipo de maquillajes. No se perdió tampoco la presentación de la última colección de Mango en la que pasó una agradable sesión de marujeo con sus también amigas Paloma Lago y Carla Royo Vilanova. Tampoco faltó Luis Medina, otra de las grandes amistades del padre de Victoria Federica.

Sin emabargo, los estudios del ex-marido de la Infanta Elena no tienen nada que ver con la moda. Estudió Gestión de Empresas y Marketing en la Escuela Superior de Estudios de Marketing y también se formó en Paris, en donde residió de soltero hasta su boda con Doña Elena. Seguro que fue en este periodo de tiempo cuando el Duque de Lugo desarrolló su pasión por los trapitos.

Es una pena que ya no aconseje a la primogénita del Rey Don Juan Carlos. ¿Acaso alguien no se acuerda de esto?