Lo que no consiga el arte... Tita Cervera acudió ayer a la feria de arte contemporáneo ARCO, como casi todos los años, para empaparse de las nuevas tendencias artísticas, como si fuera una Madonna buceando entre maquetas para encontrar el sonido de su nuevo disco. La Baronesa acudió con un conjunto Camel (una talla de más, por lo menos) y un moñito así como hecho en cinco minutos. Posó para los medios como buena ex Miss España y repartió sonrisas a todos los reporteros gráficos.
En otra parte del pabellón estuvieron su hijo Borja y su esposa Blanca pero el encuentro no llegó a producirse. ¿Las razones? No se saben. O siguen sin hablarse o acudieron a la misma feria en dimensiones paralelas y encontrarse les fue físicamente imposible. Nunca lo sabremos.