Desde hace unos días se habla de la primera portada protagonizada por Lady Gaga en Vanity Fair. La revista de septiembre se acaba de poner a la venta anticipadamente en Nueva York y Los Angeles y ha levantado expectación, como delata Google News. A la vez Katy Parry protagoniza la portada de Rolling Stone justo después de que Terry Richardson convirtiese a su contricante en el papel cuché y en las tiendas de discos en la imagen central de esa misma publicación, un trabajo que destripamos en su momento.
Con semejantes ingredientes no es de extrañar que se hable de duelo entre las dos cantantes por protagonizar todas las portadas que les sea posible. Últimamente las fotos de ambas invaden los kioscos de todo el mundo. Casi ningún editor parece poder permitirse el lujo de prescindir de ellas ni de ahorrar en fotógrafos de caché para que las inmortalicen. Hacemos un repaso a esa guerra de egos.
La única cosa en común que tienen las fotos de Rolling Stone con las de Vanity Fair es que tanto Katy Perry como Lady Gaga lucen unos topless muy descafeinados. El fotógrafo Mark Seliger nos muestra a una Katy bastante insípida y con exceso de Photoshop, algo que sucedía también en las fotos que protagonizaba hace poco en Esquire. Aunque sólo hemos visto unas cuentas tomas de lo que Nick Knight ha hecho con Gaga el trabajo tiene una pinta mucho mejor- ¿Será que inspira más que Katy a los chicos de las cámaras?
A pesar de que podemos ver al duo hasta en la sopa, hay revistas en las que no será fácil ver a una o a la otra. Lady Gaga ha protagonizado ya una portada en el Vogue francés y otra en el Vanity Fair de Estados Unidos -dos revistas en las que muchas celebrities ansían por aparecer-. A Katy es dudoso que la veamos de momento en alguna de las dos cabeceras estrella de Conde Nast. Su techo de momento es Cosmopolitan, pues su fama no vuela tan alto.
Fotografiar el lado más sensual de Lady Gaga no deja de ser un experimento, mientras que en Katy Perry es lo normal. Las revistas masculinas prefieren a la segunda pues deben pensar que a la mayoría de sus potenciales lectores no les gustan las chicas raras.
Una de las cosas por las que Lady Gaga ha comenzado a interesar a mucha gente es precisamente por ese toque de loca modernidad que la acompaña. Y es que todo lo que toca parece un poco más moderno. No es de extrañar que las revistas de tendencias como V Magazine o la española Neo2 -que se permitió el lujazo de abrir con su imagen uno de sus últimos números- ansíen presumir de ella.
Aunque la edición que reproducimos aquí de Esquire con foto de Lady Gaga sea de Indonesia y la de Katy Perry la estadounidense lo cierto es que son ya varias las publicaciones en las que ambas han coincidido. Además de en Rolling Stone también lo han hecho en Cosmopolitan. Y es que parece que en ocasiones se pisan los pies.
La prueba de que Lady Gaga es un fenómeno global es que no se limita a ser fotografiada para revistas de moda o de música, también puede aparecer publicaciones de información general, como El País Semanal. El suplemento quiso tener su propia portada con la cantante, aunque esas fotos habían sido publicadas ocho meses antes en Out.