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En los últimos tiempos los ‘baby hairs’ se han puesto de moda. Pero sin embargo no todas terminan de saber exactamente de qué se tratan. "Los conocidos como 'baby hairs' o cabellos bebés son esos pelitos más finos y cortos que el resto, que nacen alrededor de la frente y que, aunque en algunos casos son temporales y crecen - ya que son pelo nuevo o recién nacido (de ahí el nombre) – otras veces nunca sobrepasan los 4 o 5 centímetros, se quedan cortitos y, por su textura diferente y muy volátil, resultan más difíciles de controlar, sobre todo en peinados como un recogido pulido", explica la peluquera Diana Daureo.
Aunque son encantadores y aportan un toque natural, a veces pueden resultar difíciles de manejar ya que suelen ser más sensibles a los cambios hormonales, al calor y a la tracción, lo que los hace propensos a frizz y rebeldía. Sin embargo, según la experta, "conociendo las técnicas adecuadas los 'baby hairs' no sólo se pueden dominar sino también modelarlos o 'esculpirlos' y hacer de ellos parte clave de tu look, y es que en los últimos tiempos se han convertido en una alternativa muy favorecedora que adoran las celebrities”, cuenta.
En primer lugar, mantener el cabello bien hidratado es fundamental para evitar que los ‘baby hairs’ se vuelvan aún más rebeldes, por lo que es recomendable utilizar acondicionadores y mascarillas hidratantes para mantenerlos suaves y manejables. A la hora de peinarlos, utilizar un peine fino resulta muy adecuado ya que ofrecerá un mayor control para que estén en su sitio.
Algunos peluqueros emplean incluso un cepillo de dientes con un poco de fijador para un resultado más pulido. Y es que en estos casos, aplicar un poco de gel o cera de peinado en las áreas donde los ‘baby hairs’ son más rebeldes pueden ayudar a mantenerlos en su lugar sin apelmazarlos. También si se rocía un poco de laca sobre el mismo peine o cepillo es muy adecuado para fijarlos sin que las áreas que están en contacto con ellos se manchen ni que quede una sensación pegajosa.
De igual modo, conviene evitar realizar trenzas o coletas muy tirantes sobre los ‘baby hairs’ ya que corren peligro de romperse puesto que son bastante finos. Hay que tener también en cuenta también la temperatura a la que se van a trabajar con el secador, siempre que se pueda prescindiendo de ellos, especialmente de la plancha.
Diana Daureo comparte tres looks fáciles de conseguir con los que dar con un resultado perfecto.
-Recogido: “es importante delimitar la zona a partir de la cual comienzan los baby hairs. Para ello, humedece la zona de cabello de la frente y cepilla hacia el rostro los pelitos cortos, separándolos del resto de la melena. Realizar el recogido deseado y una vez conseguido, comenzar a trabajar la zona de los cabellos bebé”.
-Natural: en este caso explica que resulta esencial es utilizar algún producto para fijar los mechones a la frente. “Para un estilo natural será suficiente rociar con laca las cerdas de un cepillo de dientes antes de peinar los mechones. Si se busca un look más atrevido, recomiendo utilizar un gel de alta fijación para adherir los ‘baby hairs’ a la piel y poder darles forma más fácilmente”.
-Atrevido: “con ayuda del cepillo de dientes, peina los pelitos suavemente y colócalos a tu gusto, bien hacia la dirección del resto del cabello o creando formas en espiral para un estilo racial con toque folklórico. Para finalizar aplicar con los dedos un poco más de gel fijador sobre los baby hairs, y ¡listo!”, concluye la experta.