"¡Qué vergüenza da tocar para pocos!", dice Malú nada más bajarse del escenario. Estamos a veinte kilómetros de Madrid y acaba de cantar para media docena de periodistas 'Quiero', su nuevo tema estrella. Luces, todos sus músicos, unas diez pantallas, ropa de calle. Nos hemos colado en sus ensayos apenas doce días antes de comenzar la gira y la emoción y los nervios son palpables. "Aunque no lo parezca, soy muy tímida", dice a continuación la sobrina de Paco de Lucía, la misma que llenó cuatro noches seguidas el Palacio de los Deportes madrileño (récord) e hizo corear a más de 60.000 personas aquello de 'Me has enseñado tú' o 'te amo con fuerza, te odio a momentos'. 19 años de carrera, 11 discos… Malú comienza su gira número catorce... en medio del 'Caos'.
¿Qué cosas nuevas traes?
¡De todo! Va a ser un show espectacular. La primera vez que lo vi me quedé con los ojos como platos. Cada canción va a ser una sorpresa. Hay motores en el escenario, rotores, pantallas… ¡de todo! Y tengo una ilusión enorme por arrancar y volver a verme encima de un escenario. Estoy deseando que llegue el 16 de abril para empezar en Córdoba.
¿Estás nerviosa?
Mucho. Una mezcla entre emoción, ilusión y ansiedad.
¿Qué tal lo llevan los de cerca?
Habría que preguntarles a ellos (risas), pero diría que bien. Ten en cuentas que son ya muchos años juntos, con el mismo equipo casi, y ellos mismos viven esa emoción de empezar gira de nuevo después de unos tres años de parón y componer disco.
¿En qué piensas antes de salir a cantar?
Nada concreto. Tienes tanta adrenalina y tanta energía ene se momento que no puedes… Estás tan ansiosa que el único pensamiento que tienes es que vaya bien y que vaya bien.
¿Te gusta estar sola en ese momento?
Sí, completamente. Soy muy hermética los días de concierto. Y una hora antes más. Siempre me quedo sola. Sobre todo cuido que nada exterior me pueda alterar la concentración. Quieres dar lo mejor de ti allá arriba y eso requiere que nada te distraiga.
¿Alguna manía?
Probablemente mil millones (risas). Pero sobre todo agua, mucha agua. Constantemente la busco. Y me santiguo mil veces, parece una coreografía.
¿Amuletos?
Desde pequeña llevo un cordón del Gran Poder que me regaló mi abuela. Y siempre va conmigo, me protege.
¿Ves a la gente desde arriba?
Depende de cómo tengas puestas las luces. El cañón te ciega muchísimo si está muy bajo, así que yo suelo pedir que esté un poquito más alto para poder ver. De hecho, hasta muchos metros más allá puedo distinguir dónde está sentada mi familia.
¿Alguna vez has visto alguien entre el público que has dicho: 'mira qué guapo/a'?
(Risas) Hay gente muy guapa siempre en mis conciertos.
¿Se te ha olvidado alguna vez la letra?
Sí, aunque más que se te olvide es que pasa algo que por un segundo te desconcentra. Luego tiras de oficio y vuelves a retomar. Tratas de recuperar rápido y normalmente nadie se da cuenta. No suelen pasar grandes desastres.
¿Tienes bromas internas con tu equipo sobre el escenario?
Muchas, tenemos mil guiños entre nosotros. Ten en cuenta que son muchos años juntos.
¿Qué tipo de ropa prefieres allá arriba?
Siempre me gusta estar lo más cómoda posible y sentirme yo guapa, pero que ese vestuario sea también parte del show. No solo pienso en salir estupenda, siempre intento buscar una armonía entre el vestuario y la escenografía. Eso sí, el negro me gusta mucho.
¿Taconazos?
Depende, pero sí soy muy de tacón.
¿Algún color al que tengas especial manía?
Amarillo. No puede haber nada a muchos metros a la redonda, ni un cordón (risas) de una zapatilla de alguien del staff. Si esa persona se sube al escenario, ese cordón se le tiene que quitar. Se me grabó a fuego desde chica, es algo que los artistas tenemos muy presente.
¿Pides algo en el camerino?
Agua, solo eso. Mi camerino es súper aburrido. Ni comida ni alcohol ni nada…¿Un concierto que recuerdes especialmente?Imposible. Vivo tantas cosas y tan grandiosas en tantos, que no puedo elegir uno. Llevo casi veinte años de conciertos…
¿Un tema que no puede faltar?
'Aprendiz', es como mi sombrita, siempre va conmigo.
¿Qué tema te apetece cantar más de este último 'Caos'?
Me cuesta decir uno, es que cuando pones todas las canciones en pie de este disco caminan fenomenal todas. Son canciones que están ansiosas de escenario. Son tan vivas que es injusto elegir una.
¿A veces pesa ser Malú?
Sí. Cuando eres muy exigente, te cargas mucha responsabilidad encima y eso genera mucha tensión. Aunque es verdad que todo eso se va al subirte a un escenario. Subierte ahí te equilibra. Al final... te compensa.