Todo está en internet. Existen blogs, webs y apps que ejercen de tutoriales para casi todo y entre las que están relacionadas con moda y tendencias han proliferado las llamadas DIY (do it yourself), el ‘hazlo tú misma’ de toda la vida. De la ‘customización’ de una prenda a un biquini de crochet o un zapato de Prada, del ‘tie dye’ a la técnica del ‘patchwork’, ninguna tendencia se libra de ser observada, analizada y desgranada por expertos que te enseñan y animan a hacerlo en casa con tus propias manos.
Customizar la cazadora vaquera
Las cazadoras vaqueras están siendo las protagonistas de la primavera y en especial las ‘tuneadas’ que, por obra y gracia de manos expertas, se convierten en piezas únicas y que reflejan la personalidad de su propietaria. Las más barrocas apuestan por rellenar cualquier centímetro de su chaqueta con tachuelas, parches o grafitis, otras como Miley Cyrus prefieren el estilo ‘vintage’ de las del diseñador Tony Alamo, obras únicas pintadas a mano con aerógrafo, y hay quienes cosen en su cazadora recuerdos de conciertos, viajes y momentos importantes de su vida. Customiza sin miedo, el vaquero lo aguanta todo.
Crochet, del baño a la pasarela
Aunque a las manos hábiles de una madre o una abuela les basta con echar un ojo a una prenda de crochet para sacar un calco en pocos minutos, quien no disponga de esa virtud tiene en internet una ‘guía fácil’ para copiar el biquini de Alessandra Ambrosio. Otras prendas de ganchillo que podrían convertirse en las reinas del ‘hazlo tu misma’ son el chaleco de Helena Bordon, una apuesta setentera de la firma Proenza Schouler y en una categoría más avanzada, el pocho calado y bordado de Emilio Pucci, un DIY con nivel de dificultad alto.
El desteñido ‘tie dye’
En los años 70 y 80 si una prenda se manchaba de lejía no se tiraba, se le hacía un desteñido gradual que le devolvía todo su esplendor y del que resultaba algo similar a la camiseta de Kelly Brook. Otra opción era la de realizar nudos (tie) y teñir (dye) para un acabado a parches. Esta técnica tiene muchas variantes que pueden partir de una prenda de color que se sumerge en lejía para llegar al pantalón de Elle Macpherson, o de una clara a la que se aplica el tinte para conseguir el de Olivia Palermo.
La técnica del ‘patchwork’
Consiste en confeccionar una prenda mediante la unión de pequeñas piezas de tela que pueden ser de diferente color, tamaño e incluso material. Con esta técnica se pueden realizar vestidos, chaquetas, faldas o pantalones, personalizarlos e incluso renovar los que están estropeados. Si vas a realizar una prenda en ‘patchwork’ desde cero será necesario coser todos los retales hasta formar un tejido con los metros necesarios para la prenda elegida, se hace el patrón y se trabaja del mismo modo que con cualquier otra tela sólo teniendo en cuenta que habrá que rematar las costuras de las uniones que se hayan cortado.
Los flecos
Para ‘customizar’ prendas de vestir o realizar accesorios nada mejor que una buena tira de flecos colocada estratégicamente donde nadie se la espera. Puedes utilizar flecos de seda, de cuero, de algodón e incluso mezclar diferentes texturas, basta con cortar y coser. Existen tutoriales para tunear bolsos, camisetas, pantalones, faldas y todas las prendas imaginables e incluso para realizar accesorios como collares o personalizar sandalias.
Ponle tu nombre
El lujo hoy no es llevar a la vista una marca sino tu propio nombre. Una de las apuestas que más acogida ha tenido en el ‘street style’ ha sido la camisa personalizada. La estilista Giovanna Battaglia y la modelo Gigi Hadid han sucumbido a los encantos de Dresshirt, una firma que utiliza como lienzo la camisa blanca masculina que confeccionan en seda y se ‘customiza’ con el color base, el de la tipografía y el mensaje que deseas llevar en la espalda. Hace un par de temporadas fue la hermana de Giovanna Battaglia quien puso nombre a los ‘clutchs’ del ‘fashion system’, así que con un poco de maña y el tutorial adecuado tú también puedes llevar tu nombre dónde y cómo quieras.
Fusilando marca
En internet todo parece posible. Puede ser un sacrilegio, pero hay gente tan mañosa que es capaz de enseñarte a hacer un calco de un zapato de Prada, de Miu Miu o de Christian Louboutin. Normalmente requiere, además de los materiales adecuados que se explican detalladamente, unas manos muy mañosas y una paciencia infinita, pero todos los tutoriales coinciden en que es divertido y, sobre todo, muy gratificante.