Aciertos
1 El Valentino con capucha y piel de la novia y su moño con la tiara Fringe de Mónaco. Impacto.
2 El impresionante abrigo de Carolina de Mónaco y la belleza de Grace en el rostro de Carlota Casiraghi. Ellas no necesitan más.
3 El abrigo rosa con guantes de Beatriz Borromeo. Exquisito.
4 El largo con cuadros XL de Elisabeth von Thurn und Taxis. Très chic.
5 El Caprile en cristal rojo que lucía Macarena Gómez. Doble presencia española.
6 Las flores blancas en lágrima y las velas que llenaban la entrada de la iglesia y su interior. Romanticismo.
7 Los largos, los vestidos abrigo y los guantes en la etiqueta de las féminas. Cumpliendo el protocolo de esa noche. Lauren Santo Domingo en azul noche.
8 El encaje de Ana Beatriz Barros. Delicado.
9 La 'fondue party' previa al enlace, en el refugio The Eagle Ski Club, en una noche de nieve y velas. Suiza Chic.
10 El entorno elegido para la boda, el convento de Rougemont. Arte románico bajo la nieve.
Errores
1 Que Valentino esté moreno Copacabana y estirado como Nefertiti haga sol, llueva, nieve o venga una glaciación da mucho miedo.
2 Que los acompañantes masculinos de Valentino vayan maquillados a juego da más miedo aún. ¿La parada de los monstruos?
3 El modelito negro con collar verde doble de la acompañante de Valentino no debió causar mucho quebradero de cabeza a su dueña. Insulso.
4 El manido rojo escote corazón de Fabiola Beracasa.
5 Alberto de Mónaco acudió sin Charlene que se decantó por quedarse en Mónaco e ir al torneo de rugby Santa Devota. Inexplicable.
6 La princesa Estefanía también hizo un 'missing' en toda regla. Familias y familias.
7 Naty Abascal rechazó la invitación porque tenía trabajo. Despropósitos, pero al menos no es familia.
8 Mujeres sin edad que llegan a una boda suiza, con 10 grados bajo cero, con escotes de alfombra roja caribeña. Infarto.
9 La equivocada idea de algunas invitadas de que a una boda no se lleva abrigo. En climas extremos, sobre vestidos, abrigos. ¿Por qué no?
10 Ojo con los vestidos con cola sobre suelos con nieve. No es necesario meter la nevada a la capilla.