Limpios cortes en estructuras que se destruyen para reinventarse es la arriesgada apuesta de Los Alvarno para un verano en luminosos marfiles e intensos negros. El sí y el no de la coquetería.
1. Pantalones de talle alto e inspiración africana. Ultra femeninos. CON HILO
2. Vestidos largos segunda piel que muestran piernas interminables. CON HILO
3. El algodón en relieve en mares de organzas de seda. Riqueza. CON HILO
4. Algunas geometrías y arquitecturas floreadas al extremo. Riesgo. SIN HILO
5. Paleta impecable con blancos, marfiles, azul intenso y negros. CON HILO
6. Las carteras joya de mano de Laura Pons y los charms Pandora. Impacto. CON HILO
7. El cristal de Murano en color, el oro, la plata, los brillantes. Fiesta Rock. CON HILO
8. Ciertas transparencias al límite de lo visible. Ojo. SIN HILO
9. La frialdad marmórea del Palacio de Neptuno para una colección sin exceso de color. Error de escenario. SIN HILO
10. El es y no es. El Nada es lo que parece. La imaginación evolutiva de los Alvarno. CON HILO