El amor no es eterno y los tatuajes… ¡¡tampoco!!

Carlos Otero 17/09/2013 09:48

La famosa tonadilla que decía aquello de “yo llevaré para siempre en mi piel… un tatuaje con tu nombre, amor” no tiene por qué cumplirse. Y es que, por mucho que digan, el amor no es para siempre y los tatuajes, tampoco. Eduardo Cruz (el hermanísimo cantante de Pe y Mo) se ha borrado un ‘tatu’ que se hizo cuando bebía los vientos por Eva Longoria pero no es el único que ha eliminado de su piel las señales de un amor finiquitado.

Según informaba la prensa hace unas semanas, el benjamín de la saga de artistas renacentistas (que lo mismo interpretan, que dirigen, cantan, bailan o presentan ‘La Quinta Marcha’) ha ocultado el nombre de su ex dibujando un nuevo tatuaje sobre éste.

Curiosamente Longoria también tuvo que deshacerse de los tatuajes que se realizó en honor a su exmarido, el jugador de la NBA Tony Parker, que le puso una cornamenta de campeonato para desesperación de la mujer ‘ídem’. La actriz se había tatuado la palabra ‘nine’ (nueve, el número de su marido en el equipo) en la nuca. Por obra y gracia del láser, su espalda vuelve a lucir impoluta.

Guti, nuestro ‘futbolista-tronista’ favorito, también se borró el tatuaje que se hizo en honor a su exnovia, la ‘supermodelo’ Noelia López. En un arrebato de pasión el exfutbolista reconvertido en personaje televisivo se tatuó el nombre de su examada. Para deshacer el entuerto nada mejor que hacerlo el mismo día que tatuarse encima las iniciales de su sustituta. El mismo día que se dibujaba en la piel las letras RB (Romina Belluscio) el futbolista pintó una estrella sobre la palabra ‘Noe’.

La multitatuada Angelina Jolie utilizó la misma técnica pero aprovechó las fechas de nacimiento de sus hijos para modificar el tatuaje que se hizo en honor a Billy Bob Thornton cuando eran pareja.

Denise Richards tenía tatuado en el pie el nombre de Charlie Sheen y una vez que lo echó de su vida decidió eliminarlo también de su cuerpo reconvirtiéndolo en un artístico dibujo.

El atormentado Jhonny Depp vivió con pasión su romance con Winona Ryder hasta tal punto que se dibujó en su piel de manera indeleble ‘Winona Forever’. Cuando el amor se acabó decidió cambiarse la frase y donde antes ponía ‘Winona’ ahora se lee ‘Wino’, que significa borracho.

La traca final la pone Drew Barrymore. La niña de ET tenía varios tatuajes de sus años turbulentos (seis, en concreto) y ha decidido borrárselos. Al parecer va a convertirse al judaísmo por amor a su marido, Will Kapelman, y según dicta la creencia, no puedes ser enterrado en un cementerio tradicional si en tu cuerpo hay signos de tinta.