Si hace una década lo valiente y noticiable era “salir del armario”, ahora nos encontramos ante el caso contrario: los famosos saltan a los medios para autoafirmarse heterosexuales. Siempre ha gustado hacer el chascarrillo sobre los gustos de cama de fulano o mengano (especialmente en el propio mundo gay donde les gusta ver resquicios de homosexualidad por todos lados) y algunos VIPs han creído necesario salir del paso de estos dimes y diretes. Políticos, cantantes, futbolistas, actores… son muchos los famosos que han tenido que “salir del armario” y anunciar su heterosexualidad.
Los últimos que han negado cualquier gusto por las personas de su mismo sexo han sido Justin Bieber y George Clooney. El primero aseguró en una entrevista que esos comentarios viene de “gente malvada que lo odia” (lo que irritó a los homos más activistas y combativos) y que “no tienen sentido porque todo el mundo sabe que salgo con una chica”.
Por su parte George Clooney ha sido muy taxativo al respecto: “Me habré muerto y aun habrá gente que diga que yo era gay. No me importa ni una mierda”, declaró esta primavera a la revista para el público homosexual The Advocate. “No voy a dejar que nadie haga que parezca que ser gay es algo malo”, añadió para dejar claro que desmiente sin mayor preocupación.
Mario Vaquerizo es otro famoso que se pasa la vida negando su homosexualidad. El marido de Alaska asegura que tener pluma no conlleva ser gay. En su autobiografía lo deja bien clarito: “Me molesta mucho que un heterosexual me llame maricón pero me ofende y me irrita más que un gay activista me diga a la cara que en el fondo vivo en el armario y toda mi vida es un paripé. ¡Qué lástima me das, mariquita inquieta e intolerante”. ¡Olé por Vaquerizo! Estas valientes declaraciones no estuvieron exentas de polémica y levantaron ampollas entre algunas travestis pancarteras.
Con mucho mejor humor se toma los rumores de homosexualidad Robbie Williams. Casi todas las semanas sale a la luz un nuevo rumor sobre si a Robbie Williams le va la carne o le pescado. El cantante lo niega con humor y acidez y ha llegado a declarar que envidia la promiscuidad del mundo gay y en concreto la de George Michael en los parques de Londres “porque me encantaría encontrar entre los bosques a decenas de mujeres con las que mantener sexo fácil y anónimo”.
Heterosexuales con el peso de la ley
Todo lo contrario ocurre con Alejandro Sanz que quiso desmentir su homosexualidad acudiendo a los tribunales. La periodista Carmen Rigalt lo sabe bien: Debido a un articulo editado en 1999 en el que la periodista atribuía la condición de homosexual al de Moratalaz en la revista dominical del diario El Mundo se tuvo que indemnizar con 30.000 euros al cantante. Aquí se puede leer el artículo en cuestión. ¿Tan injurioso es lo que dice la periodista?
Isabel Pantoja tampoco lleva nada bien que se diga de ella que es lesbiana. En 2001 la periodista Karmele Merchante perdió una demanda interpuesta por la tonadillera por insinuar en Canal Sur que a la folclórica le iba “el rollo bollo”. El comentario le costó a la colaboradora la friolera de diez millones de las antiguas pesetas, 60.000 euros de ahora.
Expediente Pe
Penélope Cruz figuró hace algunos años en la polémica lista de 'gays no confirmados' que publica la revista sensacionalista The National Enquirer, donde también fue incluida la mexicana Salma Hayek. La de Alcobendas, que en España no pero en USA sí habla de su vida privada, declaró en 2009 el programa de David Letterman que no era lesbiana y ni tenía una relación lésbica con Salma: “Ahora dicen que somos amantes. Lo siento, ¡pero no es el caso!"
El ex novio de Penélope, Tom Cruise, también ha tenido lo suyo. Toda la vida de Dios ha estado en la calle el rumor de que el protagonista de Top Gun responde al arquetipo de lo que Rocío Jurado llamaba “niñas de pelo corto”. El actor lo ha desmentido continuamente por activa y por pasiva (nótese la gracia de la frase hecha). Sin embargo el oscuro matrimonio que ha tenido con Katie Holmes y su precipitado divorcio ha levantado de nuevo las sospechas.
Políticos y mandatarios
Nuestra ex vicepresidenta del Gobierno favorita, Maria Teresa Fernández de la Vega, también negó su lesbianismo en una entrevista: “Es un rumor sobre mí que se han inventado para hacer daño con algo que, oye, respeto absolutamente. No tengo ninguna homofobia, ¡pero no soy homosexual! Si lo fuera, no tendría ningún problema en decirlo. ¡Pero es que no lo soy!”, dijo.
En esta línea también desmintió el rumor que la vinculaba con la Sara Carbonero de la Televisión Pública, la periodista María Escario: ”¡Pero si no la conozco, que no nos hemos visto en la vida! ¡Y me casan con ella! Me han casado con muchas, eh, cuidado. Pero sobre todo con ella”, declaraba en 2008. De Rajoy también se dice pero de momento el Presidente del Gobierno ni confirma ni desmiente.
Alberto de Mónaco también tuvo que declarar la década pasada que fuese homosexual. Unas fotografías del hermano de Estefanía en un festival gay en Estocolmo potenciaron los continuos rumores de homosexualidad del príncipe Monegasco. La aparición de varios hijos ilegítimos y su boda con Charlene parecen haber enterrado para siempre esos rumores.