Véronique, 'la primera dama del Madrid'
Se conocieron hace 26 años y no tardaron en darse cuenta de que están hechos el uno para el otro. "Nada más verla, él dijo que tenía delante al amor de su vida. Y así hasta hoy", dijo Zidane según cuenta una prima de Véronique. Él, con 17 años, ya jugaba en Cannes y ella, que tenía 19, era la capitana del equipo de majorettes de Rodez.
De hecho, muchos la definen justo como 'la capitana de la familia'. Sus orígenes almerienses (por parte de padre y madre: sus apellidos de soltera son Fernández Ramírez) fueron decisivos en el fichaje de Zizou por el equipo blanco, ya que ella quería volver a su tierra. Véronique lo dio todo por su marido y por su proyecto familiar, abandonando su carrera de bailarina clásica, para la que había sido becada en París. Cuando se conocieron en aquella discoteca parisina, ella no sabía nada de fútbol: "Zinedine fue quién me enseñó todo sobre el fútbol y desde que empezamos nuestra relación, el fútbol me comenzó a interesar", ha dicho ella.
Y el interés se contagia a sus hijos. Tienen cuatro: Enzo, Luca, Theo y Elyaz. Todos chicos y todos prometen en las canteras del Real Madrid. Enzo, de 20 años y centrocampista como su padre, es quien más apunta maneras. Hasta hace unos días era el propio Zinedine quien le entrenaba en el Castilla, segundo equipo del Madrid, pero los entendidos en materia recalcan que el talento del chico es propio (o quizá está en los genes).
El primogénito de los Zidane le debe su nombre al ídolo de su padre, Enzo Franescoli, el jugador uruguayo, pero ha elegido el apellido de su madre, Fernández, que resta la presión de llevar el ‘Zidane’ a la espalda.
Luca, el segundo, tiene 17 años y juega como portero en la división juvenil del Real Madrid. Theo, de 13 y Elyaz, de 10, también juegan en categorías inferiores del club merengue que ahora entrena su padre. Todo queda en familia.