Irina Shayk, entrenando para ser una “madraza”
Lejos de quedarse en casa esperando a que su flamante marido, Cristiano Ronaldo, vuelva al hogar tras la batalla (ayer el Real Madrid le endosó cinco goles al Espanyol), la impresionante y guapísima modelo rusa Irina Shayk se entrenaba ayer en el palco del Santiago Bernabéu para ser, además de todo un mujerón, también una madraza. Suponemos que su reloj biológico empieza a latirle a la mujer del futbolista, que con 25 primaveras se empleaba ayer a fondo en poner orden con los revoltosos niños. Entre los pequeños, el hijo de Cristiano Ronaldo, Cristiano Ronaldo Junior.Irina Shayk, entrenando para ser una “madraza”
Lejos de quedarse en casa esperando a que su flamante marido, Cristiano Ronaldo, vuelva al hogar tras la batalla (ayer el Real Madrid le endosó cinco goles al Espanyol), la impresionante y guapísima modelo rusa Irina Shayk se entrenaba ayer en el palco del Santiago Bernabéu para ser, además de todo un mujerón, también una madraza. Suponemos que su reloj biológico empieza a latirle a la mujer del futbolista, que con 25 primaveras se empleaba ayer a fondo en poner orden con los revoltosos niños. Entre los pequeños, el hijo de Cristiano Ronaldo, Cristiano Ronaldo Junior.Irina Shayk, entrenando para ser una “madraza”
Lejos de quedarse en casa esperando a que su flamante marido, Cristiano Ronaldo, vuelva al hogar tras la batalla (ayer el Real Madrid le endosó cinco goles al Espanyol), la impresionante y guapísima modelo rusa Irina Shayk se entrenaba ayer en el palco del Santiago Bernabéu para ser, además de todo un mujerón, también una madraza. Suponemos que su reloj biológico empieza a latirle a la mujer del futbolista, que con 25 primaveras se empleaba ayer a fondo en poner orden con los revoltosos niños. Entre los pequeños, el hijo de Cristiano Ronaldo, Cristiano Ronaldo Junior.Irina Shayk, entrenando para ser una “madraza”
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Lejos de quedarse en casa esperando a que su flamante marido, Cristiano Ronaldo, vuelva al hogar tras la batalla (ayer el Real Madrid le endosó cinco goles al Espanyol), la impresionante y guapísima modelo rusa Irina Shayk se entrenaba ayer en el palco del Santiago Bernabéu para ser, además de todo un mujerón, también una madraza. Suponemos que su reloj biológico empieza a latirle a la mujer del futbolista, que con 25 primaveras se empleaba ayer a fondo en poner orden con los revoltosos niños. Entre los pequeños, el hijo de Cristiano Ronaldo, Cristiano Ronaldo Junior.