El cuello alto, la tendencia más práctica de la temporada

divinity.es 11/02/2015 13:37

Mientras que Taylor Swift o Alexa Chung optan por realzar su silueta sin dejar de lado la discreción, Kim Kardashian lo adopta como uniforme para exhibir sus curvas en todo su esplendor. Lo lleva de todas las maneras posibles, desde vestidos largos o looks monocolor con faldas lápiz, hasta versiones con transparencias que rozan lo fetichista, como el que lució en la Semana de la Moda de París.

Las colecciones pre-fall de mujer anuncian una oleada de cuellos cubiertos para el próximo invierno: si Cèline sugiere vestidos con cuello largo, Valentino hace lo propio con piezas retro a lo Gibson Girls y jerséis de punto.

Stella McCartney aconseja looks monocolor minimalistas, pero el juego de superposiciones es la clave: debajo de chaquetas y abrigos como hace Gucci, o con vestidos que dejan entrever nuestra prenda estrella, como JW Anderson o Dior. En el caso de la maison francesa, Raf Simons también juega con los materiales combinando ante o pelo con piezas cuajadas de lentejuelas.

Si buscamos otras referencias sobre el cuello alto, podemos fijarnos en Marlene Dietrich o Greta Garbo, que comenzaron a lucir esta prenda con pantalones en los años 40. Un look simple y efectivo al que Audrey Hepburn añade un calzado plano en Bunny Face, o que Jackie Kennedy combina con un trench. Sharon Stone es un ejemplo de que se puede llevar hasta sobre la alfombra roja: en la gala de los Óscar de 1996, la actriz lució un cuello alto en color gris oscuro bajo un vestido escotado de terciopelo negro. ¿Quién se lo podría imaginar?

Otra vertiente es a la que se han sumado campañas y blogueras, que parecen esconder la cabeza en el cuello a modo de tortuga. Nada del otro mundo: solo consiste en meter el pelo dentro del jersey, una curiosa modalidad de la que hasta Leandra Medine, editora de Man Repeller, tiene su propio manual.

Detrás de este auge del cuello alto hay dos factores de la cultura pop. Por un lado, que los años 70 han sustituido a la década de los 90 como referencia de la moda y el cine (siendo el cuello de cisne para los 70 lo que supuso la camiseta de cuello redondo para los 90) y por el otro, la forma en que el feminismo se ha convertido en un tema de conversación actual reflejado en la moda.