{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
El pelo, para muchas personas, es sinónima de confianza. Es por eso que la falta o la ausencia del mismo puede convertirse en todo un complejo. Así, en algunos ámbitos, como puede ser el mundo de la interpretación, se convierte en todo un handicap para encontrar trabajo. Es por eso que muchos de nuestros famosos recurren a un trasplante de pelo o a una peluca o peluquín. Y, además, en la mayoría de ocasiones, no nos damos cuenta.
Este fue el caso de la actriz Macarena Gómez. Lo cierto es que la joven no es que tuviera problemas de crecimiento de pelo, sino que participó en una producción que le dañó el cabello, provocándole calvas y su caída. Es por eso que la actriz tuvo que llevar peluca durante más de un año y, efectivamente, nadie se dio cuenta.
También, el actor John Travolta ha llevado peluca. El americano se hizo famoso gracias a su interpretación en Grease como Danny Zuko. Es por eso que, cuando fueron pasando los años, nos dimos cuenta que el actor iba perdiendo densidad capilar. Algo de lo que también se dio cuenta el propio John y quiso ponerle remedio llevando una especie de peluquín.
Otra famosa que es muy aficionada a las pelucas es Katy Perry. La cantante lleva más de 15 años en el mundo de la música, cosechando una infinidad de éxitos y premios. Es por eso que, debido a su gran caracterización, siempre que se ha subido a un escenario ha mostrado un peinado nuevo.
De la misma forma, la actriz Keira Knightley ha utilizado peluca. Pero eso sí, solamente lo ha hecho cuando su trabajo lo requería. Así, en 2016, durante el rodaje de Orgullo y prejuicio, la joven confesó que lució un pelo que no era el suyo durante un tiempo.
La menor de las Kardashian, Kylie Jenner, empezó a teñirse el pelo cuando solamente tenía 16 años. Por eso, con el paso del tiempo, y al darse cuenta de que el cabello se estaba estropeando, decidió comenzar a lucir pelucas de distintos colores.
También, Naomi Campbell ha sometido su pelo a una infinidad de cambios debido a su trabajo como modelo. Es por eso que la maniquí sufre de alopecia. Así, para seguir con sus compromisos profesionales, decidió usar pelucas, lo que hace que parezca que tiene más pelo y, además, puede cambiar de peinado cada vez que quiere.