Los tatuajes de Lorena Castell: del homenaje a su hijo al ovni que la une a los 'heavys de Gran Vía'

Lorena Castell no solamente es, ahora, una apasionada de la cocina, sino que, también, durante todo este tiempo hemos podido ser testigos de que le encanta la música y, sobre todo, los tatuajes. Es por eso que la presentadora, colaboradora y actriz lleva una gran cantidad de ellos decorando su piel. Pero, ¿cuáles son sus significados?

Lorena es una apasionada de los tatuajes. Tanto es así que abrió su propio estudio en el madrileño barrio de Malasaña. Es por eso que ha sido ella misma quien se ha decorado su piel. Así, a través de las redes sociales, la presentadora suele enseñar cuáles son las novedades. 

Uno de los tatuajes más especiales que lleva en su piel es el que se hizo junto a los ‘heavys de Gran Vía’. Dos hermanos, los Alcázar, que se encuentran cada día cerca de la plaza de Callao y se hacen fotos con los transeúntes. Juntos se tatuaron un platillo volante que Lorena tiene situado en el antebrazo izquierdo.

Otro de los tatuajes que le ha marcado para siempre es el que lleva en la espalda. Lorena ya ha contado en varias ocasiones que es una apasionada de las terapias holísticas y de todo lo espiritual. Es por eso que siempre que se sometía a esas terapia veía a una lechuza. La presentadora tiene el tatuaje justo en la espalda junto a un corazón que es atravesado por una espada. 

También, en el antebrazo izquierdo, lleva una figura femenina con un corazón. Además, una zona que Lorena tiene cubierta de tatuajes es la de los hombros. Es ahí donde podemos ver un flamenco, una enredadera y un ojo de Horus egipcio. De la misma forma, Lorena también se tatuó una imagen muy especial en honor a su hijo. Así, se hizo una mujer acunando a un bebé. También, en el interior del brazo derecho lleva tatuado su número de la suerte, el 7, y la frase ‘Una Volta’.

Sí que es cierto que Lorena sabe que no todos los tatuajes salen bien. Y más si te lo haces tú misma. Es por eso que su peor tatuaje lo lleva en su piel. Según ella misma ha contado, en un primer momento iba a ser un planeta del Sistema Solar, pero luego se convirtió en ‘el planeta patata’. Uno de sus últimos tatuajes ha sido un cuchillo, que se lo ha hecho a la altura del pie.