Gurú vip: así es Karen Berg, la guía espiritual cabalista de Madonna y Demi Moore

Ton Vilanova 02/08/2016 16:34

Ella y su marido, el rabino Philip Berg (fallecido hace tres años), lograron romper el veto que existía sobre las mujeres y la cábala, unas enseñanzas enraizadas en la tradición judía que no estaban permitidas a los gentiles, ni a las mujeres, ni a los hombres menores de 40 años.

También consiguieron hacerla mediática gracias a famosas como Madonna, que llegó a donar 15 millones de dólares a la organización del matrimonio Berg, algo que levantó más de una crítica en el conservador mundo del judaísmo ultraortodoxo.

Un mensaje atractivo

¿Cuál es el mensaje con el que ha conseguido “enamorar” a tantas personas y personajes influyentes? En plena época del yoga y de la meditación, la Cábala (una interpretación del Antiguo Testamento arraigada en la tradición judía) asegura que es posible lograr el conocimiento y el equilibrio con el objetivo de encontrar la paz interior total. Karen Berg decidió que la luz que ella había descubierto en la cábala tenía que comunicarla a todo el mundo, sin tener en cuenta edad, sexo, raza o religión. Y así hizo.

¿Cómo empezó todo?

El rabino Philip Berg fue ordenado en su Brooklyn natal en 1951. Se llamaba Shraga Feivel Gruberger y estaba casado con Rivka, con quien tenía ocho hijos. A mediados de los 60 conoció a Karen y lo dejó todo por ella, pasó a llamarse Philip Shraga y juntos siguieron encargándose de la pequeña oficina de seguros que él había heredado. Por motivos económicos tuvieron que emigrar a Israel donde nacieron sus hijos, Yehuda y Mijael.

En 1969 volvieron a Estados Unidos y fundaron el Centro Mundial de la Cábala. El éxito no tardó en llegar, y como suele pasar, tampoco tardaron en llegar las críticas e incluso las amenazas.

Incluso el FBI investigó al matrimonio Berg y han sido demandados en numerosas ocasiones, por ex seguidores y familiares de seguidores. 'Newsweek' colocó a Berg como el cuarto rabino más poderosos de EEUU y el 'LA Times' llegó a calificarlos de secta.

Polémicas aparte, la realidad es que cuentan con 40 centros en todo el mundo (incluso en Dubai, país musulmán), cuatro millones de estudiantes en sus escuelas y 50 grupos de estudios en todo el mundo.

No sabemos si Karen Berg conseguirá la paz mundial pero está claro que la autora de varios ‘best sellers’ entre ellos, ‘Dios usa pintalabios’, no desistirá en el intento.