Ingredientes
(Para tres moldes de 15 cm de diámetro)
200gr de mantequilla
200gr de azúcar moreno
200gr de harina
2 cucharaditas de levadura
4 huevos
1 cucharadita de vainilla en pasta
Chips de chocolate negro
Para el relleno
200gr de azúcar moreno
125 ml de leche
90gr de harina
125gr de mantequilla
2 cucharadas de chips de chocolate
1 cucharadita de vainilla en pasta
Para la crema
4 claras de huevo
225gr de azúcar moreno
350gr de mantequilla
2 cucharaditas de vainilla en pasta
Paso 1: Elaboración de los bizcochos
El primer paso que tenemos que realizar es mezclar la mantequilla con el azúcar moreno. Cuando la mezcla esté perfectamente mojada, vamos añadiendo los huevos uno a uno. Después tamizamos la harina con la levadura y mezclamos de nuevo. Cuando la masa esté homogénea añadimos la vainilla y los chips de chocolate. Para evitar que los chips se vayan al fondo, podemos pasarlos antes por un poco de harina. Con la masa terminada, procedemos a colocarla en los moldes. Alma nos recomienda extender la masa con una espátula y colocar un poco más en los bordes que en la zona central. Lo metemos al horno a una temperatura de 180 grados, durante 25 minutos.
Paso 2: El relleno
Calentamos la leche con el azúcar hasta que se disuelva. Cuando el azúcar está completamente disuelto incorporamos la harina y removemos enérgicamente para que no se hagan grumos. Después añadimos la mantequilla, los chips de chocolate y la vainilla. Después refrigeramos el relleno hasta que adquiera consistencia y mientras preparamos la crema.
Paso 3: La crema
Esta buttercream es de merenge suizo. Primero mezclamos las claras con el azúcar y lo calentamos al baño maría hasta que se disuelva el azúcar por completo. Cuando esté listo lo montamos hasta conseguir punto de nieve y añadimos la mantequilla a temperatura ambiente. Subimos un poco la velocidad de la batidora y le añadimos también la vainilla.
Paso 4: La decoración
Desmoldamos los bizcochos cuando ya estén fríos y con ayuda de la lira intentamos que todos nuestros bizcochos tengan la misma altura. Cogemos una base giratoria para que nos sea más fácil decorar nuestras tartas. Colocamos una base de cartón del tamaño de nuestros bizcochos. Colocamos un poco de crema en la base para que se quede pegado en la base. Encima del primer bizcocho ponemos una buena capa de nuestra crema de relleno y procedemos con los otros dos restantes. Cuando los tengamos todos colocados, cogemos nuestra crema de decoración y aplicamos una primera capa que cubra toda la tarta. Después rellenamos la manga pastelera con la crema y utilizamos una boquilla redonda. Vamos aplicando puntos de crema en hilera y con ayuda de una espátula las vamos estirando. Hacemos esto de forma repetitiva cómo si estuviéramos dibujando unas escamas de pescado. En la parte superior hacemos lo mismo, pero comenzamos por el centro y hacemos una espiral hacía afuera. Cuando esté terminada la metemos en la nevera para que se enfríe y la podemos traspasar a su plató de presentación.