Luna, la hija de Carlos Lozano y Mónica Hoyos, toma una decisión tras cumplir los 18

Fue el 11 de junio de 2004, cuatro años antes de su sonada ruptura, cuando Carlos Lozano y Mónica Hoyos se entrenaron en la paternidad con su primera y única hija en común. Luna, una niña muy deseada que llegaba al mundo en plena ola del éxito de estos dos rostros: el presentador ejercía de maestro de ceremonias del talent show musical más famoso de nuestro país y la actriz nutría su extensa trayectoria participando en series de televisión y siendo colaboradora en diferentes formatos.

Pese a que en los últimos tiempos se ha puesto en manifiesto en diferentes programas del corazón que la relación de la expareja no llegó a reconducirse del todo tras la ruptura, la realidad es que ambos han permanecidos unidos en cuanto a la protección y el bienestar de la joven, a quien pusimos cara después de que soplara las velas de su 18º cumpleaños.

De ella sabemos, gracias a una reciente entrevista para la revista ¡Hola! que realizó junto a su madre, que una de sus grandes pasiones es la música, “toca el piano y la guitarra que es una locura y canta muy bien”; no tiene previsto seguir los pasos de sus progenitores en televisión porque no es algo “que le llame poderosamente la atención” y no descarta hacer sus pinitos en en el mundo de la moda al igual que su padre, “que ha sido un modelo superbueno y ha protagonizado numerosas portadas”.

Precisamente ha sido él, Carlos, el encargado de desvelar la decisión que ha tomado su hija, la cual espera “que se mantenga al margen” de los medios. El colaborador de ‘Sálvame’ se deshacía en halagos al hablar de su niña con nuestros compañeros de ‘Europa Press’. “Estoy muy orgulloso de mi hija, la adolescencia es muy suave, es muy madura para la edad que tiene y es muy inteligente”, se le cae la baba al hablar de Luna, que ha tomado la determinación de marcharse de España muy pronto: “Se va a Inglaterra a estudiar, estoy deseando, muy bien”.

A pesar de su corta edad, Luna tiene ya decidido hacia dónde quiere orientar su futuro. “Quiero hacer Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales. Siempre me ha gustado la carrera, entre otras cosas, porque me encanta debatir, que creo que no se me da mal”, comentaba en la citada revista del corazón, donde revelaba que ya ha tenido la oportunidad de participar en varios debates para jóvenes como el MEP –Modelo de Parlamento Europeo-, llegando incluso a recibir ofertas para participar en sesiones fuera de nuestro país.