Hace más de tres años que la vida de Anabel Alonso dio un giro de ciento ochenta grados. Fue en 2020 cuando la actriz se convertía en madre por primera vez junto a su pareja, Heidi Steinhardt. Aunque al principio valoraron adoptar, finalmente fue Steinhardt quien gestó al bebé. La llegada de Igor, su hijo, ha sido toda una revolución en sus vidas y ahora, cuando la intérprete de Padre no hay más que uno va a cumplir su sexta década de vida, ha hecho una reveladora confesión sobre la maternidad y cómo la está llevando junto a su compañera de viaje.
Acostumbrada a blindar su intimidad, que le llegó la fama gracias a su participación en series de tantísimo éxito como 7 vidas o Amar es para siempre, la maternidad le hizo cambiar el chip y, desde que supo que se iba a estrenar en este nuevo papel vital, sus redes sociales nos han permitido conocer a la Anabel más personal. Ahora, con motivo de su 60 cumpleaños, la actriz ha concedido una entrevista en 'ABC' en donde ha desvelado en qué punto se encuentra con su pareja, la actriz Heidi Steinhardt, tras la llegada al mundo de Igor.
"Me ha cambiado mucho y para bien. He aprendido a relativizar mucho y a centrarme en lo importante", ha comenzado diciendo en el medio mencionado. En este sentido, además del cambio personal que ha tenido tras la llegada al mundo de su primer y único hijo, Alonso también ha hablado abiertamente de cómo gestionan Steinhardt y ella su relación de pareja con un integrante más en casa.
"Un hijo puede resaltar las diferencias en una pareja, no todo es color de rosa porque hay que estar de acuerdo en muchos detalles y estar al pie del cañón", ha continuado dicidiendo. "Hay cosas que te unen y otras te pueden separar, pero si al final lo superas, el vínculo se refuerza", ha relatado.
Como les ha ocurrido a muchas parejas mediáticas -como fue el reciente caso de María Pombo y Pablo Castellano con la llegada de su segunda hija, Vega- la actriz ha querido visibilizar que el secreto de continuar en el mismo barco es remar en la misma dirección y ser conscientes que el amor se transforma, pero que eso no tiene que significar que se tenga que termianr: "El amor es pico y pala, va cambiando y exige que te adaptes. Hay gente que lo idealiza, que se enamora del amor y, cuando se pasa la pasión, cambia de pareja. A mí eso de empezar una y otra vez me da mucha pereza".