Ágatha Ruiz de la Prada, a punto de convertirse en abuela: "Le van a poner un nombre muy raro"

Ágatha Ruiz de la Prada está a punto de convertirse en abuela. El pasado mes de octubre, el diario ABC anunció en exclusiva que Tristán, el hijo de la diseñadora con Pedro J. Ramírez, iba a ser padre de su primer hijo. "Tristán, que es el hombre de mi vida, nunca me había comentado su deseo de ser padre. Y ahora me he enterado a los cuatro meses", confirmó la propia diseñadora ante la sorpresa. Según adelantaban entonces, se desconocía el sexo del bebé y lo único que pedía es que "esté sano y sea feliz".

La diseñadora, que nunca ha escondido su deseo de ser abuela, tiene la esperanza de jubilarse "rodeada de un montón de nietos con muchas amigas". Y parece que ese deseo está a punto de empezar a hacerse realidad. Ágatha ha sido una de las famosas que ha acudido este miércoles a ARCO, y allí ha hablado con los compañeros de Europa Press sobre el inminente nacimiento de su primer nieto.

Ágatha Ruiz de la Prada contaba que todavía no es abuela, pero que es algo que puede pasar "en cualquier momento". "Mi hijo está nerviosísimo. Están en Zaragoza, va a nacer allí el bebé", respondía al preguntarle si iba a acudir al hospital cuando se enterase de su nacimiento. La diseñadora ha contado que su hijo y su pareja no han querido saber el sexo del bebé hasta su nacimiento y que a ella le gustaría que fuese un niño. "Le van a llamar un nombre muy raro", ha comentado antes de irse.

Así son Tristán y la madre de su primer hijo

Hasta que se hizo pública la noticia del embarazo, poco se conocía de la vida privada del hijo mayor de Pedro J. y Ágatha. Tristán tiene actualmente 36 años y siempre ha mantenido su vida privada lejos del foco mediático. Cursó fuera de España y se licenció en Historia, pero su carrera profesional ha estado siempre ligada al mundo de la moda, ya que desde 2015 es el consejero delegado de la marca de su madre.

Según publicó ABC al anunciar el embarazo, la pareja de Tristán es una "prestigiosa científica" de 35 años que prefiere seguir viviendo en el anonimato. Ninguno de los dos esconde la ilusión por su paternidad, pero han preferido no dar declaraciones públicamente. Ágatha ha dado algunos detalles, pero también prefiere mantener la vida privada de su hijo alejada del foco.