"Familia y amigos. Los que están, los que llegarán y los que no salen en la foto", ha escrito el amigo de la familia como comentario a la instantánea. En ella, Pedritísimo aparece en el medio. A la izquierda, en una esquina, Elena Furiase, sin mirar a cámara. A su lado, Gonzalo Sierra, su chico, que la abraza. Y a la derecha, la matriarca Lolita, muy sonriente y apoyando un codo en la mesa.

La noticia de su embarazo fue un boom mediático. "Ni me voy a alejar de mi trabajo, ni me voy a alejar de la prensa ni nada, solo quiero estar tranquila y vivir este momento con la mayor naturalidad posible", dijo a la prensa, pidiendo tranquilidad ante el revuelo que había suscitado su embarazo. Aquel día, la hija de Lolita aclaró que le daba igual que fuese niño y niño y confesó que "con el seguimiento de la prensa" estaba "de los nervios", por lo que solicitaba calma "por el que está aqui dentro (señalándose la tripita)".

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Hasta que se anunció que sería madre, nadie sabía de la pareja de Elena. Con Gonzalo Sierra, padre de su hijo e íntimo amigo de su hermano Guillermo, lleva desde octubre del año pasado. Tiene 25 años, cinco menos que Furiase, y vive en La Moraleja, al igual que ella. Entre sus hobbies están deportes como el skate o el snow y es aficionado a la fotografía. Además de ser el bajista de la banda Albha, que comparte con su cuñado, Gonzalo trabaja en Mila Film, una productora de publicidad y de cine independiente.

"Somos amigos de toda la vida, de hace muchísimo tiempo. Estamos muy contentos, toda la familia, mi madre y mi hermano también, pero todos necesitamos estar tranquilos. Somos todos provida", aclaró Elena hace unas semanas. "Yo tenía muchas ganas de ser madre, pero la verdad es que vino como vino y esto aunque no se busque siempre es una alegría".