Con una amplia trayectoria en los fogones y la pequeña pantalla, Karlos Arguiñano se ha convertido en uno de los chefs más populares y queridos de nuestro país. Y es que este carismático vasco, que acaba de soplar las velas de su 73 cumpleaños, es un cocinero y un showman de primera. Desde que iniciara su andadura en la pequeña pantalla allá por el año 89, supo conquistar a la audiencia con su genuina personalidad, su naturalidad y su infinito sentido del humor. Esta es, sin lugar a dudas, la clave de su éxito. Sean cuales sean las circunstancias personales por las que atraviesa, el presentador transmite su pasión por la cocina con una contagiosa alegría que engancha a los televidentes. Y eso que en estos últimos meses no lo ha tenido nada fácil.
“Intento todos los días animar a la gente a que cocine, y que lo haga variado porque cuanto más variado, mejor alimentado estás”, aseguraba Arguiñano en una reciente entrevista con Pronto, revista en la que descubría la delicada situación de su hermana Loinaz: “Mira, esta semana la he donado médula, que tiene leucemia. Ya lo hice hace 15 años pero ahora ha tenido un bajón. Y para donar te hacen un montón de análisis y a mí el médico me dijo: ‘Karlos, sigue haciendo la vida que haces, porque estás de puta madre’. ¿Y eso gracias a qué? Al estilo de vida y la alimentación”, recalcaba la importancia de seguir una buena dieta.
La pandemia del coronavirus sigue causando estragos en la sociedad pese a que lleva casi dos años conviviendo con nosotros. El miedo a enfermar, el fallecimiento de conocidos y familiares o las estrictas medidas adoptadas para evitar nuevos contagios llevaban a María Luisa, su esposa, a extremar precauciones por el pánico. “Mi mujer ha estado meses sin salir de casa. La suerte es que no vivimos en un piso, sino en el campo, y ha podido pasear porque tenemos huerta, gallinero, animales”, explicaba a la revista Pronto.
“Ha estado muy agobiada porque cuando tienes siete hijos y once nietos, te preocupas. Ella temía que la pandemia pillase a más de uno, pero por suerte a nadie de la familia nos ha tocado de momento”, se explayaba el chef, que en el programa ‘Dos parejas y un destino’, emitido el pasado mes de marzo, admitía que estaba siendo bastante duro. “Se nos está haciendo muy largo, esta historia está siendo dura de verdad. Luisi no sale de casa por la pena”, desvelaba Arguiñano, que añadía que habían estado casi un año sin ver a sus nietos pese a residir en la misma ciudad.