Ecografía 5D: ver la cara del bebé y otros motivos por los que no hay que perdérsela

  • Con este tipo de ecografía podrás ver a tu bebé de una manera más realista que nunca.

  • Pero además de satisfacer nuestra curiosidad como padres, la ecografía 5D es de gran utilidad a la hora de cuidar de la salud del feto.

Durante el embarazo los días que toca ecografía se convierten en fechas señaladas, porque suponen una oportunidad única para cruzar aquello que nos separa del bebé y nos permite obtener cualquier tipo de información sobre él. Cuando parecía que las ecografías 4D eran lo último de lo último, y que ya poco más podíamos pedirle a esta técnica para poder saber de nuestro bebé antes de su nacimiento, llegan las ecografías 5D, que suponen un nuevo avance a la hora de mejorar muchos aspectos relacionados con el embarazo. Algunos de ellos son mero capricho, perfectamente comprensible, como disfrutar de una mayor nitidez a la hora de ver el feto. Otros, en cambio, se relacionan directamente con la salud del bebé, aportando información que puede ser de mucha utilidad a la hora de tratar posibles complicaciones.

Diferencias con otro tipo de ecografías

La ecografía en 5D realizada en el embarazo, te permite ver, gracias al desarrollo tecnológico, a tu bebé en el útero en cinco dimensiones. Es decir, se trata de ecografías que ofrecen una gran nitidez y que permiten la grabación de vídeos de una realidad extrema en tiempo real, a través de imágenes que muestran con detalle las características del feto, incluyendo tonalidades y matices de la piel. Es lo último a la hora de captar imágenes tridimensionales del feto en tiempo real en el útero de la madre. Se pueden utilizar gafas interactivas para ver en 3D el vídeo del bebé, como si en ese momento se materializase.

La clásica ecografía 2D sigue siendo la más habitual y la que se hace desde el comienzo del embarazo, tanto para confirmarlo como para comprobar que no se trata de un embarazo ectópico o extrauterino. Este tipo de ecografía bidimiensional es perfectamente válida, sobre todo en las primeras semanas de embarazo. La ecografía 3D permite ver la estructura anatómica del feto en profundidad, y la 4D, además, permite ver los movimientos fetales.

Ventajas de las ecografías 5D

Verás a tu bebé con gran nitidez

Desde el momento en el que descubres que estás embarazada no hay nada que ansíes más que saber cómo será tu bebé cuando nazca, y es inevitable hacer el esfuerzo por imaginar su cara y sus rasgos físicos. Los equipos de ecografías 5D son extremadamente modernos y poseen un software que ofrece una imagen en alta definición que te permite apreciar, con una nitidez inigualable a día de hoy, los rasgos faciales del feto y sus movimientos en directo. Proporcionan a la imagen ultrasónica la tonalidad de la piel y su textura, de una manera tan realista que lo que sientes es que has podido conocer a tu bebé antes de que nazca, algo que parece un sueño hecho realidad.

Es más fácil detectar malformaciones y otras complicaciones

Los diagnósticos tempranos pueden ser cruciales a la hora de tratar, y también de curar, patologías, enfermedades y malformaciones, incluso cuando el bebé se encuentra todavía en el útero de la madre. La ecografía 5D se ha convertido en una de las herramientas claves a la hora de realizar este tipo de diagnósticos, que pueden suponer un gran cambio en la vida del bebé.

La tecnología de este tipo de ecografías permite medir con rapidez y precisión el desarrollo del bebé durante el embarazo en términos nutricionales. Las estructuras fetales, tanto internas como externas, permiten identificar el síndrome de Down y otros tipos de trastornos genéticos. Las anomalías cromosómicas, los síndromes genéticos y las malformaciones fetales pueden anticiparse gracias a la observación de la cantidad de líquido que el feto acumula en la nuca. Gracias a los diagnósticos precoces, se puede anticipar la cirugía intrauterina cuando sea posible, algo que aumenta las posibilidades y la calidad de vida del feto.

Conocer antes el sexo del bebé

Es cierto que hay parejas que prefieren desconocer cuál será el sexo de su bebé hasta el momento del nacimiento. Pero la gran mayoría querría saberlo casi en el mismo instante en el que se confirma el embarazo porque, como decíamos antes, es casi imposible no comenzar a imaginar cómo será nuestro bebé en el futuro, y eso inevitablemente pasa por saber si será del sexo masculino o femenino.

Mientras que con la ecografía 2D hay que esperar hasta la semana 20 de embarazo para conocer el sexo del bebé, momento en el que se realiza la ecografía para confirmar que e desarrollo del feto es correcto y detectar posibles malformaciones, las ecografías 3D y 4D nos permiten adelantar ese momento y descubrirlo en torno a la semana 16.

La ecografía 5D va más allá, y puede ayudarnos a ver el sexo del bebé ya en la semana 12, lo que supone un gran aliciente para muchas parejas a la hora de hacerla.

En cualquier caso, dado que no es un tipo de ecografía que resulte barato, los expertos recomiendan hacerla entre las semanas 26 y 30 de embarazo, en las que puede resultar tremendamente útil conocer cuál es el estado del desarrollo del feto.