Según ha explicado en exclusiva el periódico 'The Sun', los duques de Sussex han decidido contratar los servicios de la doula Lauren Mischon (casada con el nieto de lord Mishcon, el abogado de Diana de Gales durante su divorcio con el príncipe Carlos) de cara a su parto el próximo mes de abril. Esto no debería sorprender mucho al entorno de la pareja ya que Meghan es una adepta al yoga y a la meditación: "Meghan está enfocada en tener energía calmada y positiva alrededor de su parto – ella cree mucho en eso", dijo una fuente cercana a Us Weekly. Pero… ¿en qué consisten los servicios de esta figura?
El propio significado de esta palabra ya nos da unas cuantas pista. La palabra viene del griego y, según el Diccionario del español actual, de Seco, Andrés y Ramos, su significado es el siguiente: mujer experta, sin formación específica, que presta apoyo y asistencia a las embarazadas durante la gestación, el parto y el postparto. Sobre todo, el apoyo que brindan es emocional/moral durante el embarazo y el parto, ya que no son enfermeras, e intervienen también con métodos de manejo del dolor.
En España y gracias a Verdeliss (aunque ya se lo ha quitado de su descripción en redes), entre otros vips, esta profesión se dio a conocer un poquito más. En 2014, la influencer anunciaba a sus seguidores que comenzaría un curso para instruir a mujeres en esta disciplina. Frente a la cámara, Verdeliss explicaba un poco mejor su labor en su Instagram: "Una doula acompaña, presta soporte físico, logístico, emocional a una mamá si así lo solicita, de forma voluntaria, con libertad y plena consciencia [...] Un acompañamiento continuado, escucha, apoyo, comprensión, promover la confianza en sí misma a la mamá, prestar información si así lo solicita siempre desde el "no juicio" [...] Abogo porque se regularice la actividad de las doulas, para evitar mala praxis, para armonizar el tándem matrona-doula en pro de una maternidad satisfactoria".
O al menos así lo entiende el Consejo General de Enfermería (CGE) que lleva años alertando sobre los riesgos de las doulas a la hora de que una madre se plantee sustituirla por una matrona: "su actuación pone en peligro la vida de la madre y su hijo", explican en su web. Y además detallan que "la doula es una figura que no existe legalmente en España ni en la Unión Europea, no son profesionales sanitarios y están fuera de la ley [...] por lo que cualquiera de sus consejos o actos ponen en peligro la salud de las mujeres y de los niños. Además, esta actividad no está reconocida en el Impuesto de Actividades Económicas y es propensa a formar parte de la economía sumergida".
Además de esta advertencia, el pasado diciembre conocimos una noticia que nos alertó de su peligrosidad: un bebé murió en Vigo porque le faltó oxígeno durante el parto después de que los padres decidieran repetir la experiencia con su primer hijo y tener al segundo en casa (aunque esta vez el niño vino de nalgas). La pareja había contactado con varias matronas para cuando llegara el parto y tener su asistencia en casa y, unos días después, trascendió la noticia de que en la casa fue una doula la que asistió el parto (aunque no se citó su presencia en el informe médico ni en el forense).
Mientras que la doula es una parte sin regulación que acompaña de manera particular a madres durante el embarazo y el parto, la salus son enfermeras hipercualificadas. De hecho, como explicó Paloma Santos a Divinity.es: "Las salus somos enfermeras, auxiliares o puericultoras especializadas en neonatos y bebés, que hemos tenido que pasar un curso de formación específico sobre los cuidados del bebé". Es decir: la primera diferencia que encontramos es que están cualificadas.
La segunda es que no actúan en los mismos momentos del embarazo/parto: mientras que una doula actúa durante el embarazo y el parto, las salus ejercen después de que la madre dé a luz, con el objetivo de que tengan ayuda con los cuidados del bebé durante las primeras semanas de vida. Además, también ofrecen asistencia psicológica ante una posible depresión post-parto o ayudan a las madres cuando estas estén en situaciones “límite” y no puedan atender al bebé: darle el biberón, quitarle el gas, cambiarle el pañal… y mientras ella hace todo eso, la mamá puede descansar y dormir plácidamente, con la tranquilidad de que su bebé está en buenas manos.
Tania Llasera, Paula Echevarría, Mar Flores, Miguel Bosé o Blanca Cuesta, son algunas de las celebrities que han contratado los servicios de una salus.