La historia de un bikini o la cosificación de Kolinda Grabar-Kitarović, la primera presidenta de Croacia

divinity.es 12/07/2018 17:01

Si vas al rectángulo de búsqueda de Google y pones 'presidenta de Croacia', sale automáticamente una ristra de términos asociados, los más buscados. Estos:

'Bikini', 'edad', 'en la playa', 'en bañador'... Ocho de diez hacen referencia a algo que no tiene que ver con su cargo, ni con el Mundial de fútbol que la ha puesto en la primera línea de la actualidad. De hecho, ninguno de esos diez lo hace. Los titulares de las noticias no son más optimistas, sobre todo para una de las dos mitades de la humanidad: "¿Es la presidenta de Croacia la mandataria más sexi del mundo?", se preguntaba Caracol TV. "La presidenta de Croacia alienta a su selección", dice El Comercio antes de pasar a explicar los abrazos que dio a los jugadores sin camiseta en el vestuario.

Este nuevo ejemplo global de cosificación del cuerpo de la mujer ha crecido además exponencialmente por un parecido físico y una foto viral. Al parecer, muchos creyeron que una foto de la actriz Nicole Natalie Marrow, conocida como Coco Austin, esposa del rapero estadounidense Ice T, era la presidenta croata, y la instantánea comenzó a 'rular' por la red como la pólvora. Ahí comenzaron a multiplicarse los fuegos machistas, y acabó apareciendo otra imagen que sí eran de ella en bañador, años antes de ganar las eleccioones.

Kolinda Grabar-Kitarović, mientras tanto, no se ha cortado en seguir haciendo lo que le parecía oportuno en cada partido del Mundial. Acostumbrados a gestos institucionales contenidos, ella no ha dudado en bajar de la grada para celebrar con sus jugadores cada uno de los partidos ganados (estarán en la final del próximo domingo), pero muchos medios lo han explicado con cierto 'deje' y aludiendo siempre a su belleza física, algo que no sucede cuando Felipe VI o Macrón han hecho lo mismo con sus selecciones.

Tampoco ha dudado Kolinda en regalar una camiseta de cuadros blancos y rojos a su homólogo estadounidense, Donald Trump, y a la primera ministra británica, Theresa May, que pidió a sus ayudantes que consiguiesen una de Inglaterra para corresponderle el gesto, pero que no llegó hasta el final del partido. Todo quedó recogido en redes:

"Me gusta estar aquí como una seguidora de mi equipo más. Porque cuando les animo me gusta hacerlo de una manera que a veces puede ser un poco inapropiada en la zona vip. Pero esta noche me han permitido llevar los colores nacionales. La FIFA y los anfitriones me lo permitieron. Esto me hace feliz", explicó el día del partido de Croacia contra Rusia. Los anfitriones acabaron cayendo tras una prórroga.

Kolinda (1968), diplomática de profesión antes de meterse en asesora y luego pasar a primera línea política, tiene dos hijos con Jakov Kitarovic, con quien lleva casada desde hace más de dos décadas. La mayor se llama Katarina y es patinadora. De hecho es campeona juvenil nacional. Y luego está Luka, el pequeño.

Jakov Kitarovic, empresario de profesión, estuvo unos años sin trabajar fuera de casa, pero sí dentro: durante los años más complicados se dedicó al cuidado de los dos hijos de la pareja. Fue sobre todo cuando ocupó el cargo de secretaria general adjunta de la OTAN para asuntos de Relaciones Públicas, la primera mujer en hacerlo. Cuando ella resultó elegida presidenta hace cuatro años, comenzó a trabajar en una empresa de software en Zagreb, donde viven.

Con todo, su carácter no deja de ser conservador. Nacida en una aldea cercana a Rijeka, Grabar-Kitarovic se define a sí misma como: "una mujer de pueblo", "una niña de la naturaleza" y una "católica practicante".