1.Momento manipedi
Uñas de gel y manicuras fantasía con bien de corazones con las que no terminas de atreverte o una permanente rojaroja tirando del color clásico de la fecha. Puede que la mejor cita de San Valentín la tengas en el salón de uñas de tu barrio. Otra opción: pintauñas nuevo y probar en casa con un tutorial. Ahí va una inspiración.
2.Algo azucarado: pendientes de corazón
Son tendencia desde el año pasado y, tengas el plan que tengas, pueden ser la clave para darle a tu 'outfit' un aire amoroso. ¿La buena noticia? Los puedes llevar los otros 364 días del año sin necesidad de excusas. Hemos fichado estos que llevó Lourdes Hernández (Russian Red), son de Bimba y Lolay están rebajados en su página web.
Fuente: Instagram @russianready / Bimba y Lola
3. No hacen falta las rosas, pero sí los libros
Hacerse por fin con un libro que estabas deseando no necesita excusa, pero por si se da el caso, tómatelo como parte del planazo de amor propio de San Valentín y aprovecha para hacer una compra que defienda valores e intereses.
Desde un repaso en profundidad por la historia de las mujeres que nunca te contaron: referentes que no son los de siempre y que representan a todas, como la enciclopedia gráfica 'Herstory: una historia ilustrada de las mujeres' (Lumen). A ensayos que abordan la reflexión feminista traspasando fronteras como en 'El himen y el hiyab', de Mona Elthaway.
O, simplemente, celebrar el impulso editorial que por fin da más lugar a las autoras con una novela que, precisamente, habla de relaciones desde un plano poco convencional y apostando por la liquidez (sentimental) propia de estos tiempos: 'Conversaciones entre amigos', de Sally Rooney. Y para hombres que estén repensando su masculinidad: el recién publicado '#WeToo', de Octavio Salazar.
4. ¡Rápido, a la droguería!
No hace falta que venga en una 'smartbox'. Tan fácil como acudir a tu tienda de cosméticos de confianza en busca de un kit de 'treat yourself' elegido por ti: mascarilla facial, para el pelo, para los pies… O una bomba de jabón para darte el gusto si tienes bañera. Si además quieres hacer de la experiencia una apuesta eco-friendly, algunas ideas: el limpiador facial espumoso de Atlantia, con aloe vera puro y 100% eco, que limpia e hidrata y no contiene jabón, apto para todas las pieles y libre de alérgenos. O unas mascarilla facial de Lush, elaborada con productos naturales y 'cruelty free' (sin experimentación animal).
Fuente: Atlantia / Lush
5. ¿Quién dijo cena para dos?
No todo va a ser cocinar solo si hay visita. Prepararte algo rico con amor para disfrutarlo tú mismo debería estar en el top 1 de las prioridades culinarias. Un picoteo, una bebida apetecible (no tiene que ser alcohólica) y una receta que te apetezca probar. Experimentar con ese paquete que incluye todo lo necesario para iniciarte en hacer sushi, por ejemplo este de Curiosite, es una opción. Pero hay muchas más, que fluya la imaginación.
Fuente: Curiosite