8 claves para construir el armario perfecto

divinity.es 06/10/2015 11:01

1- Redefine tu estrategia

¿Qué te gusta y qué quieres cambiar? ¿Las prendas que tienes reflejan tu estilo actual?

2- Operación 'detox'

Una vez has hecho un análisis de los problemas, toca hacer limpieza y decidir qué prendas vas a tirar, almacenar, reparar, donar, vender o dejar en stand by para una próxima evaluación. ¿Te sientes cómoda con ellas? ¿Te gusta el material del que están hechas? ¿Están en buen estado?

3- Recoge inspiración

Leer Divinity, pasear por Pinterest o explorar tus blogs favoritos puede ser una buena forma para definir de la manera más concreta posible el tipo de estilo que te gustaría tener: colores, materiales, siluetas…

4- Crea un concepto de estilo

Recopilada la información visual, tienes que crear un concepto de estilo coherente con el que te sientas cómoda y sientas que eres tú misma.

5- Construir un armario cápsula

Selecciona de 20 a 30 piezas clave que expresen la esencia de tu estilo. Es importante escoger prendas versátiles y con un equilibrio de partes de arriba, partes de abajo y complementos que nos permitan construir el máximo de looks posibles para diferentes ocasiones.

6- Desarrolla un uniforme

Crear un cierto uniforme es una forma fácil de potenciar un estilo coherente. Muchas mujeres icónicas llevan “uniformes”: blusas, pantalones y zapatos planos podría ser uno. Trenchs, camisetas, pitillos y deportivas otro. No se trata de ir siempre igual. Dentro de cada categoría, las opciones se multiplican.

7- Compra de forma inteligente

Es uno de nuestros mantras aquí en Divinity. Cinco preguntas son claves para tomar la decisión de compra: ¿Encaja con mi estilo? ¿Me gusta el tejido y cómo me sienta? ¿Qué función hará en mi armario? ¿Llenará un vacío o se añadirá a un área en la que ya tengo muchas cosas? ¿Puedo pensar en tres looks con los que llevaría esta nueva prenda?

8- Mantenimiento

Es importante hacer mantenimiento del armario a lo largo del año. El cambio de estación es un buen momento para hacerlo. Así que... ¡manos a la obra!