Alejandro Sanz está atravesando una delicada situación personal. El artista utilizaba sus redes sociales en la madrugada del pasado sábado para contar, por primera vez públicamente, que no está bien. "No sé si esto sirve de algo, pero quiero decirlo. Estoy triste y cansado", comenzaba diciendo a través de un mensaje en su cuenta de Twitter.
El cantante quiso mandar ese mensaje "por si alguien más cree que hay que ser siempre una brisa de mar o un fuego artificial en una noche de verano". Adelantó que estaba trabajando para que se le pasara y que tenía la intención de llegar a los escenario y "algo dentro" le diría qué hacer. "Pero a veces no quiero ni estar. Literalmente. Sólo por ser sincero. Por no entrar al ruido inútil. Sé que hay gente que se siente así. Si te sirve, yo me siento igual", terminó diciendo en un mensaje que alarmó a todos sus fans.
Unos días después de esas durísimas declaraciones, el artista ha dado más información sobre su delicada situación. Con otro mensaje que ha hecho público en sus redes sociales, Alejandro Sanz ha querido agradecer el cariño que ha recibido "por diferentes vías". "He tenido un brote fuerte este fin de semana y aunque aún no termina de llegar la luz, parece que se ha despertado una luciérnaga en mi pecho", ha explicado.
El artista no quiere suspender la gira porque cree que, "con la ayuda correcta y un poco de comprensión", lo va a "sacar adelante". "Además creo que encerrarme no es buena idea. Gracias por el calorcito. Vamos a por el día de mañana. El sol està de camino", ha terminado diciendo.
Una de las primeras personas en reaccionar fue Raquel Perera, su exmujer y madre de dos de sus cuatro hijos. La que un día fue su manager explicaba que él está "bien" y que tampoco cree que sea "tan alarmante". "Creo que ha sido una manifestación muy sincera de alguien que en un momento dado se siente triste y cansado y yo creo que nos ha pasado a todos", decía queriendo además alabar la "valentía" y "generosidad" que ha demostrado su ex al escribir "un mensaje tan útil que va a ayudar a mucha gente".
Algo más preocupado se mostraba Miguel Ángel Arenas, conocido como Capi, uno de los íntimos amigos de Alejandro Sanz. Él explicaba que tiene una gira americana "con un éxito impresionante", su vida sentimental y sus hijos "están bien" y en cuanto a la salud del artista "creo que no lo hemos visto más guapo y mejor cuidado". "Él es un hombre muy reservado para sus sentimientos y ha sido una sorpresa enorme porque ha abierto su alma", decía.
El productor decía que no se ha puesto en contacto con ninguno y que estuvieron hablando "de ir en coche y presentarse en su casa", algo que no quisieron hacer si él no lo pide. "Tenemos que respetar su silencio", aseguraba Capi, tal y como puedes ver en el vídeo.
Los compañeros de Uppers, tras ponerse en contacto con la psicóloga Lara Ferreiro, han analizado las preocupantes palabras del artista. Tal y como puedes leer en el artículo que han publicado, la profesional dice que la frase de "a veces no quiero ni estar" puede hacer referencia a varias cosas. "Puede que sufra el síndrome de burn out, de estar quemado por llevar toda la vida, o el síndrome del impostor como le pasó a Shakira", explica Lara.
Según Ferreiro, también puede ser que sufra "cierta fobia social a la hora de subirse a los escenarios" y advierte que no subyace ninguna idea de suicidio. "En la ideación suicida hay un plan que se mantiene de forma constante, es algo más profundo", explica la psicóloga, que considera que es una llamada de atención con intención.