Llena de collares y abalorios, la hispanocubana Elena Tablada -madre de Helen, como así llaman sus familiares a la mujer de David Bisbal- nos recibe muy hospitalaria en su casa madrileña de La Moraleja, apenas unos días antes de partir para Miami. En unos días celebrarán allí el bautizo de su nieta Ella. Abuela orgullosa, no se corta a la hora de regalar halagos a la pequeña: "Mi nieta es preciosa. Tiene nuestros ojos, pero es igual que su padre, y espero que su carácter sea medio parecido al de David y al mío".
Elena no sólo habla de su nieta, también de sus hijas. De hecho, se muestra como la mejor embajadora de E.T.N.A., el nombre bajo el que comercializa su hija Elena las joyas que diseña y que tiene algo más abandonadas desde que es madre: "Elena ahora no tiene tiempo, piensa que cada collar lo hace a mano".
La suegra de Bisbal también habla de belleza. Cuenta que sus amigas le aconsejan que no diga su edad, pero ella la expresa sin pudor: "Tengo 60 años y me siento muy bien". Sin arrugas en la frente y con la piel tersa, nos cuenta que la clave es familiar: "Hay que decir que en lo nuestro hay mucho de genes. ¡Si hasta mi abuela con 98 años no tenía arrugas!".
La entrevista se va convirtiendo en una charla distendida y Elena se muestra tan cercana que hasta le intenta acicalar el pelo a esta periodista. Maternal y orgullosa de sus dos hijas, desmiente la operación de su hija Elena: "No se ha operado la boca como dicen por ahí, se cayó esquiando. Además a ella no le hace falta. Sólo que es muy tímida y no lo ha querido desmentir. Estéticamente en esta casa cada uno puede hacerse lo que quiera".Y es que su padre, médico cirujano y ginecólogo, fue precisamente quien la introdujo en el mundo de la estética y los cuidados: "Nos traían cremas de almendras de Santo Domingo para embadurnarnos y nos fajábamos de arriba abajo después de los embarazos". Al parecer este mismo remedio y "una fajita para que no esté suelta" es el que ha seguido su hija 'Helen' tras el nacimiento de Ella.
Elena madre sigue hablando de belleza y de sus dogmas en este asunto: "Al contrario de lo que piensa la gente, que dormir va bien, yo con cuatro horas tengo suficiente". Cuando le preguntamos sobre qué diferencias ve entre la mujer cubana y la española, lo tiene claro: "Ahora la mujer española se cuidada mucho pero cuando yo llegué a España iban al ginecólogo con su marido. De las cosas que más me llamaron la atención es que aquí nadie se hacia la pedicura", hábito todavía no muy extendido años después.
De repente surge la gran noticia, y es que en breve podría convertirse en comentarista de un programa sobre ¡sexo!: "Creo que las mujeres a partir de una edad se dejan y olvidan lo importante que es el sexo en la vida, y yo estoy encantada de poder ayudar". Esta confidencia nos la amplia el terapeuta Guillermo León, con quien Elena ya estaría preparando el programa: "La idea es que sea para una televisión en Miami, esperamos empezar a grabar en breve. Elenita es una gran mujer, abierta y positiva. Estudió cuatro años de medicina en Cuba. Ella no tiene nada que ver con la imagen frívola que algunos quieren reflejar, es más, lo mejor de ella es su gran corazón, siempre está ahí para ayudar a sus amigos".