Marta Robles: "Ya sólo bebo vino blanco con hielo, lo demás me lo bebí de jovencita"

divinity.es 13/12/2010 08:30

Confiesa que le gusta 'la gente que controla su genio' porque dice que a ella le cuesta

Pitillos y jersey negros con chaleco calabaza. La Robles campa por Madrid con 3 hijos y 8 libros a las espaldas sin inmutarse. Siempre sonríe, no sólo con la boca. Es Marta de esas mujeres que podría hacer sonreír a un enólogo bebiendo vino con hielo. No hay secretos, basta con sentarse y dejarse llevar. LO MEJOR DE LA ENTREVISTA LO MEJOR DE LA ENTREVISTAAL FINAL DEL TEXTO

'Madrid me Marta'. ¿Qué es esto?

Un bocadillo de chorizo, Nacho. (Risas).

He oído decir que Ana Rosa piensa que es la mejor guía que ha visto en 25 años...

Es una guía muy trabajada. Muy distinta a las que puedes encontrar. Es la guía que me gustaría tener cuando voy a Nueva York, a Londres y me quiero encontrar con los sitios de verdad para saber lo que sucede en cada lugar donde voy. Sirve tanto para los madrileños, que nos olvidamos de todo lo que nos ofrece la ciudad, como para la gente que viene de fuera. En esta guía hay absolutamente de todo. Restaurantes por temas...

¿Por qué estamos aquí, en este restaurante?

Estamos en este restaurante, que se llama Alizaque, porque su dueño Guillermo era compañero mío de colegio. Está muy cerca de casa y por eso vengo mucho aquí. Hace unos platos de cuchara impresionantes, tiene una terraza maravillosa en verano y es un sitio de referencia en esta zona de Pozuelo-Aravaca. Sale en mi guía, que tiene una parte gastronómica muy importante, de restaurantes, bares de tapas, sitios de catering... Pero también de tiendas, outlets...

Estamos en la era del outlet

¿Qué sería yo sin mis martichollos? Te puedes imaginar que era absolutamente obligado.

Ahora hablamos del libro pero ¿esto de beber vino blanco con hielo es un snobismo? ¿Si lo toman en Nueva York ya es moderno?

En Nueva York lo toman con hielo y…

…agua carbonatada…

Eso, y agua con gas y es lo que bebe Carmen Posadas.

El otro día estuve con ella

La adoro, la quiero muchísimo. Es estupenda y me encanta que beba el vino con hielo.

Esto será muy moderno Marta pero en ciertos sitios te pondrán verde...

A mí no me ponen verde en ningún sitio, sólo faltaba eso. (Risas). Yo bebo el vino dónde me da la gana y cómo me da la gana. Y me lo ponen, vamos que si me lo ponen. (Más risas). Ya mucha gente lo toma así lo malo es que engaña y te puedes coger un colocón brutal en un segundo porque lo bebes casi como si fuera un refresco.

¿Es divinity esto?

Hombre por favor, no lo dudes.

Vamos vestidos de calabaza los dos, como el restaurante de tu amigo Guillermo. Curioso.

Es porque el naranja es el color de la generosidad. Y nosotros somos generosos desde pequeños.

Somos generosos, eso es verdad. ¿Por qué este título, 'Madrid me Marta'?

Porque yo he jugado mucho con aquel 'Madrid me mata' en artículos a lo largo de mi vida y como soy una madrileña de pro me influyeron mucho los años de la movida y esta frase es de esa época que recoge la vanguardia de Madrid.

¿Éste es tu libro número…?

Ocho. Qué barbaridad.

Tienes tiempo para tres hijos, marido, ocho libros… ¿Hoy en día es una proeza?

Tres hijos más tres, que mi marido tenía tres.

Seis, más ocho criaturas (literarias). ¿Cómo lo llevas?

Como puedo. Mi marido me dice que no hay quién me aguante ya, que esto no puede ser.

Es que te pasas el día o de promoción o de parto

(Risas). La verdad es que sí. Pero mi marido me apoya muchísimo y entiende mi trabajo. Hago una presentación y agradecimientos en el libro y acabo dándole las gracias a mi marido y a mis hijos que son los que me aguantan.

¿Cómo se puede estar así con tanto parto?

Yo es que soy muy flaca por naturaleza, ya lo sabes. Hago pilates dos días por semana cuando puedo...

Tu amiga Posadas me contaba que la recauchuta su hija Sofía y lo dice sin pudor...

Pero cómo lo va a tener con lo bien que está. A mí es que como se me ven las arrugas si digo que me recauchuto voy a quedar fatal. (Risa). De vez en cuando me hago algún tratamiento, también con Sofía, pero mucho recauchute de momento no me he hecho. Ni tengo muchas ganas. Tengo cierto reparo con las agujas.

¿Eres miedosa?

Con algunas cosas. Con las agujas tengo mucho vértigo. Mi hermano no va ni al dentista porque se desmaya.

Ya somos dos. Yo veo una aguja y me caigo redondo. Es mi punto débil

Es que mi hermano va al dentista y dice que se lo hagan sin anestesia. Pero quitando eso yo para el resto de las cosas no suelo ser miedosa. Y tengo miedo a las agujas y a los resultados. Es que hay gente muy rara.

Es que el mundo está muy raro. Yo también prefiero sin anestesia. Y luego la gente se queda con cara de velocidad como decía Posadas

Y luego se les pone una cara muy grande. Yo cuando era pequeña tenía cara de galleta, inmensa, y con el paso de los años se me ha afilado. Imagina que me pincho y se me pone otra vez cara de galleta.

Me gusta ese Madrid me Marta, porque la frase de la movida era en positivo. Lo que nos mata de placer, de gusto. ¿Qué te mata por todo lo contrario?

En la vida me mata la mala educación, que no la puedo soportar, y algo que hay mucho en este país, la envidia. Hay personas que son buenísimas y la envida acaba haciéndolas malas. Yo cuando me preguntan qué quiero que sean de mayores mis hijos siempre digo buenos. No listos, ni ricos, no, buenos. Hay gente buena que se convierte en mala sólo por envidia.

Tú me escribiste una vez en uno de tus libros una dedicatoria (como nos vemos de libro en libro) que decía "ojala mis hijos tengan tan buena saliva". Eso no es de bueno porque y a veces soy muy malo...

Pero eres bueno.

Al menos lo intento

Eres bueno y eres educado lo que pasa que en la tele haces un papel.

Es que la tele también es un papel. ¿Cómo la ves desde dentro?

Es un espectáculo y lo respeto. Hay cosas que no comparto, cuando se salta la barrera de la dignidad humana, que a veces se pierde, pero es como en la vida.

¿En la tele todo vale?

No. Para mí no.

Somos periodistas, yo adoro la televisión pero a veces cojo el mando y me horrorizo de alguna gente con la que compartimos medio. ¿Lo ves así?

Sí. Pero la televisión, como la política, es un reflejo de la vida. Si tú te vas a una pequeña empresa ese espectáculo que a veces vemos en la tele también se da ahí, de otra manera. Nosotros no nos inventamos nada, nosotros reflejamos lo que es la vida.

¿La política es también un reflejo de la vida?

Sí, por desgracia. La política es lo peor. Está fatal. Los políticos no dan soluciones, ni opciones, no paran de criticarte e insultarse. A veces pienso, ¿de verdad pagamos a nuestros políticos para verlos en el Congreso diciéndose chorradas unos a otros? Que me cuentan algo, que hagan propuestas, que saquen a este país adelante. Además estamos en un momento en el que no hay políticos brillantes, tienen que aparecer ahora.

¿Tú crees? ¿Eres optimista?

Depende del día. Ahora que estoy a tu lado sí. (Risas).

Será por el color de mi chaqueta

Será. (Más risas).

¿A quién le recomendarías este libro para que vaya a los sitios adecuados? ¿Nunca te ha pasado eso de que te inviten a un sitio desastroso?

Yo se lo recomendaría a algunos compañeros periodistas porque nos creemos que sabemos mucho y nos olvidamos de casi todo. Y al final siempre vamos a los mismos sitios y con la misma gente. Y te olvidas de sitios maravillosos que tiene Madrid. Yo recomiendo a nuestros colegas que nuestra ciudad tiene unos museos maravillosos, no sólo París, Londres y Nueva York.

En esta guía uno puede encontrar hasta dónde comprar un botón

Mercerías donde te arreglan todo, zapaterías curiosas donde te hacen las cañas de las botas a tu medida, si tienes las piernas muy delgadas o más gorditas. Cosas curiosas que no siempre se encuentran.

¿Cuesta estar a la última?

En Madrid estar constantemente a la última es prácticamente imposible. Porque es inabarcable. Así que hay que tener un básico y sobre el básico hacerte tu propia creación diaria.

Vamos a jugar un poco

Juguemos, a ver dónde llegamos.

Comensales. Posadas nunca se pringa. Pongo sobre la mesa el 'Kamasutra' de la Trapote, la biografía gay de Ricky Martin... Este tipo de libros que salen al mercado y a veces se convierten en best seller... No es el caso de la Trapote, claro

El de Martin pues está muy bien. Lo del 'Kamasutra' es que ya está muy visto y en este caso según me he enterado un poco plagiado.

A eso iba. Con el esfuerzo de tus ocho criaturas en las espaldas que alguien llegue un día y saque un plagio qué te provoca...

Una desfachatez y una desvergüenza. En la presentación de mi libro alguien se atrevió a preguntarme si lo había escrito yo. Y hombre mira, después de ocho libros y el esfuerzo que supone pues ofende un poco. Aunque es cierto que en la literatura de todas las épocas ha habido pequeños plagios...

Y grandes negros... Le decía a Posadas que es curioso que pocos leen pero todo el mundo escribe en este país aunque no vendan. ¿Se vive de esto?

No, la verdad. De momento lo justo, pero puede ser. Carmen vende muchísimo y está traducida a 22 idiomas. Yo me conformo con haber vendido 6 mil ejemplares en quince días que lleva la guía en la calle. Carmen y yo nos reímos porque a veces nos viene gente y nos dice "podías ayudarme a escribir un libro" como si fuese una pizza vamos.

Es porque no saben que requiere disciplina, esfuerzo y tiempo, a veces sacándolo de donde no lo hay...

En mi caso no te lo puedes ni imaginar pero a mí me gusta escribir Nacho, llevo desde los trece años escribiendo todos los días de mi vida. A parte de mi programa de Telemadrid tengo cuatro colaboraciones en prensa todas las semanas, más dos quincenales en internet, más una trimestral en una revista de lujo, más mis libros, más lo que me van pidiendo.

Entonces eres rica...

¿Tú crees que con esto soy rica?

Bueno a mí me dicen "te veo todos los días en todos los sitios debes ser ya rico"... Yo si lo fuera no estaría en todos los sitios

Escribiendo artículos desde luego no voy a ser rica.

La primera vez que nos vimos yo iba como alumno de periodismo a un programa de Hermida en el que tú hacías la tertulia, de esto hace...

Pues en el 92, tela. Fíjate. ¿Y te gusté o no? (Risas).

Claro. (Risas). Y nunca hemos hablado de esto tú y yo

Sabes una cosa muy graciosa que en ese mismo programa, una chica que hace poco trabajaba de directora de comunicación de Telemadrid, me dijo "yo estuve en ese programa y te pedí que me dieras un consejo"...

El mundo es pequeño. Prólogo en este libro de Vaquerizo y Alaska

Me fui de paseo con Mario y en uno de los sitios que estuvimos fue en el Cock...

Qué divertido es Mario...

Es divino. ¿Y cómo le huele el pelo? (Risas). El caso es que nos fuimos al Cock y me confesó que allí había empezado su historia de amor con Olvido, y la mía con mi marido también. Es curioso eh.

¿Por qué Mario y Alaska? Por el juego del título y la movida, supongo...

Precisamente. Era todo un juego. Alaska, que es una persona cultísima conoce Madrid mucho mejor que muchos madrileños y me parecía un juego bonito que fuese un libro de Madrid escrito por una madrileña de pura cepa y que escribiese alguien de fuera de Madrid.

En Madrid ya no hay madrileños... ¿Tú eres gata gata?

Por todas partes. (Risas).

Y te gusta Madrid. ¿Tiene peros...?

Me gusta. Y me gustará más cuando lo terminen, porque la verdad es que no la han terminado aún.

¿Es uno de los horrores de nuestra ciudad?

Sí, las obras. Y el tráfico. Pero por lo demás es una ciudad absolutamente apasionante y que está en permanente ebullición. La gente vive en la calle y tiene opciones para todo. Cuando yo era jovencita no había más que el Corte Inglés. Ahora hay de todo en todo Madrid.

¿Qué no recomendarías jamás en tu guía?

Tantas cosas. Hay muchos restaurantes que no recomiendo.

Pero príngate...

No. (Risa). No tengo necesidad. Mira hace poco me hablaron de una discoteca de Madrid reprochándome que no la citaba y claro es que es un horror, con un ambiente terrible, llena de señoritas de pago...

De putas vaya. Si lo canta Sabina podremos contarlo

Pues sí. Pero como putas muy finas y camufladas.

Hija hace mucho que tú no sales de copas porque la noche es así, ya hay putas en todos los sitios

Hay sitios que no.

¿A qué sitios vas tú?

Pues por ejemplo al Cock. (Risas).

Seguiré tus recomendaciones

Sí, no te pierdas por ahí.

Ya no tengo ni tiempo para salir. (Risas). Hace mucho que nos vemos en las fiestas de sociedad. Cenas y eventos dónde hay gente de todo tipo...

...y pelaje. Voy poco pero cuando te sacan una vez parece que vas siempre. Y voy fundamentalmente por cuestiones de trabajo. Me parece educado corresponder con la gente.

Y qué y como te encuentras ahí...

De todo. Hay días que son de tragedia y otros más agradables.

Y hay días Marta que uno quiere huir. Yo me río mucho en las fiestas de Suárez porque cuadran muy bien las mesas pero hay fiestas que...

Yo me he hecho especialista en llegar, hacerme cuatro fotos, saludar y marcharme.

¿Eso es correcto y educado?

Probablemente no, pero es que no doy más de sí. (Risa). Pero lo aviso eh.

Imaginemos la peor mesa. ¿Con quién no te sentarías jamás?

Con un violador, con un pederasta...

Eso no vale Marta

Yo soy periodista 24 horas al día, muy curiosa, me preocupa más la gente que no tiene nada que decir, con esos no me sentaría.

Pues la sociedad está lleno de ésos

Pues por eso. No me interesan esas mujeres de pelucón, llenas de joyas y oliendo a perfume que matan.

Pues ésas son las fiestas de sociedad querida

Que nooo. Que hay de todo. (Sonríe).

Hoy he visto a Pitita Ridruejo, que me fascina, en Territorio Comanche, Telemadrid

Pitita es una mujer con una categoría personal muy peculiar y muy concienciada y entregada.

¿Qué diferencia a una Ridruejo de estas Pititas de ahora que se copian las joyas, los pelucones y los perfumes y que no tienen nada que decir y no representan nada salvo su propia vanidad?

Pues esa. La acabas de definir tú, para qué quieres que lo repita.

Esto es lo malo de entrevistar a un periodista

Claro. (Risas).

¿Qué no te gusta de tu trabajo?

Adoro mi trabajo porque soy muy vocacional, haga lo que haga. Cuando voy a una tertulia política no creo que sea más importante que un programa de moda, o que un artículo social... Lo que me disgusta es que no lo dejo en ningún momento de mi vida y eso me provoca problemas familiares. (Ríe).

¿No sabes desconectar?

Yo desconecto fatal. Entonces tengo muy poco tiempo para mí y para los míos. Y en los últimos tiempos me molesta de mi trabajo que los medios estén tan mediatizados…

¿Idiotizados?

Mediatizados. (Ríe). Idiotizados también. Yo ya no hago caso y siempre aviso que digo lo que me da la gana. Soy de las pocas periodistas que ha trabajado a la vez en la SER y en Antena 3.

Yo trabajo a la vez en la COPE y en Telecinco, o sea que...

Lo tuyo también tiene lo suyo. No entiendo muchas veces por qué los periodistas tenemos que estar definiéndonos como si fuese un examen continuo. Nosotros no somos los protagonistas.

¿Quieres dejar de mirar a esa cámara que es la mía?

Es que a ti te sacan muy bien. Pero miraré a la mía para que me saquen monísima.

Hagamos un chin, ¿o sólo es adorno y no vas a beber?

Sí yo bebo mucho vino blanco, me encanta. Pero nada más, me lo bebí todo ya cuando era jovencita. En la Universidad tomaba mucho gin tonic, ahora ya…

Terminamos. ¿Algo que te parezca divino?

El saber estar. Me gusta la gente que controla su genio, a mí me cuesta.

Divinos caprichos...

No soy nada original. Los zapatos. Un bolso, un viaje...

Un último pecado con tacón...

Los Louboutin que llevaba en la presentación de mi libro. Clásicos y taconazo. Hoy voy de plano. Me parece muy elegante ir de plano a veces, no se puede ir con taconazos todo el día.

¿Te ves divina?

No pero delgada. A partir de los 40 hay que estar delgado o no estar, dicen. (Risas).

Espero que tu libro nos 'marte' mucho, eso será que nos gusta...

Muchas gracias. No sabes qué placer ha sido charlar contigo. Tenemos que cenar un día.

La luz ha convertido la copa de vino blanco con hielo de la Robles en un mar dorado de estrellas. Como las sonrisas de esta noche. La cocina del Alizaque ya está en ebullición, como este Madrid que mata a Marta.