Famosos efímeros: disfrutaron su ratito de fama y desaparecieron

CARLOS OTERO 14/08/2016 10:38

Todos los famosos que vamos a recordar saltaron al ruedo mediático en los últimos tiempos. Su gloria mediática fue tan excelsa como breve. Durante unos días, unas semanas o unos meses, en los mejores casos, partieron la pana en la crónica social. Sus cachés se dispararon, pero tras el efecto champán, su interés se evaporó.

¿Recuerdan el caso de Anna Allen? Aquella actriz que salía en el Hola presumiendo de haber estado en los Oscar y que no había salido de Fuenlabrada. Durante unas semanas fue la celebrity más cotizada, la que más clicks generaba, de la que todos hablábamos. Sigue desaparecida pero ahora ya da bastante igual.

Katia Aveiro, hermanísima de Cristiano Ronaldo, también tuvo su momento de gloria. Con dos singles en las listas españolas (‘Boom Sem Parar’ y ‘Latina de Cuerpo y Alma’) parecía que ‘Supervivivientes’ iba a darle el espaldarazo definitivo. Han pasado dos años desde que volviera de Honduras y su interés mediático y musical es escaso tirando a nulo. La muchacha lo intentó con un presunto romance con Abraham de 'Gandía Shore', pero ni con esas.

El furor que provocó el Pequeño Nicolás (que sigue disfrutando de los últimos coletazos de su fama) tuvo a una efímera actriz secundaria: Isabel Mateos, más conocida como ‘La Pechotes’. En pleno auge por el caso de Francisco Nicolas, su mejor amiga comenzó a ser una de las más buscadas por la prensa. Llegó a conceder una entrevista en el desaparecido programa político de Sandra Barneda,: solo ejerció como tal un día.

En 2012, la Alta Sociedad tuvo nueva musa mediática. Siguiendo los pasos de otras ‘pijas famosas’ como Carmen Lomana o Naty Abascal, la simpar Toya Cassinello tomaba la televisión y las revistas con sus ademanes high class desde las pantallas de Cuatro. Sus ideas demasiado conservadoras para los progres y su personalidad demasiado moderna para sus vecinas del Barrio de Salamanca causaron sensación. Viuda de diplomático, su presencia era reclamada por tertulias, realitys, marcas y publicaciones. Tan rápido como llegó, desapareció. Nunca más hemos sabido de ella.

Alberto Isla irrumpió en el clan Pantoja como fecundador de la andina y adolescente Chabelita. Mientras era el yerno de Isabel, los programas se lo rifaban y sus citas nos tenían en un ‘ay’. Fue desvincularse de la pequeña Pantoja e iniciar su caída libre. Intentó mantenerse en ‘el candelabro’ a base de bodas falsas y montajes pero ya nos interesaba menos que un concursante de ‘El Bus’.

En la misma línea encontramos a la madre biológica de la ínclita benjamina de Cantora. Durante quince días no se habló de otra cosa en las redacciones de prensa del corazón: apareció en 'Lecturas', habló en 'Sálvame' y se rumoreó que había fichado para participar en Gran Hermano VIP. Su carrera mediática se paró en seco, y debe estar en algún lugar del altiplano peruano esperando la llamada de su representante.

Antes de que Tamara Gorro o Rafa Mora alcanzasen la fama a través de ‘Mujeres y Hombres y Viceversa’ hubo un personaje de este programa que partió la pana: Efrén Reyero. Este ex futbolista fue uno de los primeros tronistas del espacio. Su búsqueda del amor enganchó a la nación, y su final se convirtió en todo un acontecimiento televisivo. Tras abanadonar el espacio, lo fichó Antena 3 y consecuentemente su trayectoria mediática finalizó.

La crónica social y política tuvo un miniprotagonista que ha desaparecido del foco mediático de momento: el bebé de Carolina Bescansa. En la pintoresca apertura de la anterior legislatura, entre rastas y diputados en bicicleta, la parlamentaria acudió al Congreso con el churumbel, un acto que se hizo famoso (también la foto de Iglesias y Errejón acunándole) El bebé de Bescansa no ha vuelto a ocupar un escaño quizás porque no le gustó la experiencia, o porque como otros tantos bebés, está ya matriculado en alguna guardería.

Y acabamos este recorrido con la serpiente del verano de 2012: El caso del Ecce Homo de Borja y su restauradora, Cecilia Giménez. Esta jubilada abrió telediarios y se convirtió en ‘trending topic’ en todo el mundo en el verano de 2012 cuando Cecilia Giménez firmó la restauración del fresco original de Elías García del Santuario de su pueblo. La mujer firmó autógrafos, protagonizó selfies y estaba invitada a más programas que Olvido Hormigos. Hoy vive de nuevo entregada a su rutina rural.