El Nueva York de Roberto Verino

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!

Esperanza Aguirre y Chenoa apostadas en primera fila para el desfile inaugural de la 55 edición de la MBFWM. El de Roberto Verino. La propia casa anunciaba que esta propuesta estaba inspirada en "Nueva York, crisol de movimientos culturales, moda y efervescencia artística, la mítica ciudad del Gran Gatsby que rindió homenaje a Roberto Verino en el 25 Aniversario de la firma, es la gran musa de esta colección". Y sí, hubo algún deje años 20 (algún vestido que recordaba a la primavera 2012 de Gucci), pero sobre todo fue una maxificación de los 70 en grises, blancos, negros y ocres. Justo lo que Gucci (¿casualidad?) proponía el invierno pasado. Pelo corto a lo Mia Farrow, o largo a lo Ali MacGraw. Sombreros fedora que crecían al infinito y pantalones largos y anchos. Hubo también una constante (¿y polémica?) oda a la piel, que aparecía en cuellos, abrigos, bolsos, puños de los jerseys y hasta patas de pantalones. Fue el primer desfile y ya tenemos la primera instantánea de Jon Kortajarena y el primer revolcón moderil a causa de los tacones... ¡mañana de clichés!