Porque ella lo vale. Por ese único motivo se presentó Lady Gaga vestida de novia en el Art Club de Londres, después de la clausura de los Juegos ParaOlímpicos 2012 el domingo, con un vestido de novia, provisto de un corsé que luchaba por contener su amplio escote, un turbante, guantes blancos de satén, y unos altísimos zapatos color crema.
De haber sido otra celebrity le hubiéramos dedicado un 'No hay necesidad', pero siendo nuestra Lady sólo cabe celebrarlo. Porque ha sido capaz de demostrar que ser uno mismo puede ser la operación de marketing más rentable. Su particular sentido de la moda y su talento musical le han valido hasta la fecha cinco premios Grammy, doce nominaciones, cuatro apariciones en el Guinnes y la venta estimdada de 22 millones de álbumes y 69 millones de sencillos, lo que la hace una de las artistas con mayor cantidad de ventas a nivel mundial. Ha sido incluida en la lista Time 100 de las personas más influyentes del mundo, así como también figuró en un número de las listas anuales de Forbes. ¡Qué menos que vestirse como le brote!