¿Hasta cuándo Hawai-Bombai?

Adela Leonsegui 23/09/2014 11:03

Estampados tropicales

La firma Prada fue de las pioneras, las frutas, entre ellas los plátanos de la falda de Julia Saar Jamois, fueron el principio de una fiebre de estampados tropicales ante los que se rindieron las mujeres desde Rusia con Elena Perminova hasta Australia con Christine Centenera. Estampados vistosos y de colores vibrantes que se combinaban al principio tímidamente pero que se empezaron a llevar en ‘total look’ sin ningún tipo de complejos.

Hawai en el armario

Los ‘prints’ tropicales dejan de ser minoría y se multiplican por las calles en todo tipo de prendas, desde el vestido de Kate Bosworth al traje de chaqueta de Solange, pasando por el mini-mono de Taylor Swift. Son el estampado de moda y acaparan también bolsos, zapatos y bisutería. Se empiezan a normalizar los estampados excesivos y aparece una nueva corriente, menos exagerada, que mantiene los motivos florales pero reduce el colorido al verde y al blanco.

También para chicos

Tanto se estandariza el uso del estampado hawaiano que se convierte en parte del armario masculino. Cierto que no todos se atreven con ello sólo los que arriesgan en cuestión de vestuario, como el actor Julián Villagrán o el cantante Adam Levine, han decidido apostar por el trópico para vestir en eventos importantes e incluso para pasear por la calle. La clave en masculino es combinar estos estampados con los básicos de siempre.

Mirando hacia oriente

En los últimos tiempos el tamaño de las flores hawaianas ha ido aumentando de manera considerable hasta adoptar un aspecto más oriental que tropical como en el caso del vestido de Rosie Huntington-Whiteley. La nueva temporada nos traerá nuevas especies como la ‘sakura’ o flor del cerezo del vestido de Anna Wintour, que miran a Japón y no a Hawai.

La abstracción de las flores

Para el otoño no terminan de caer las flores, se vuelven más conceptuales. Unos sencillos trazos que recuerdan a los paisajes de los artistas británicos Vanessa Bell (hermana de Virginia Wolf) y Duncan Grant, hicieron del desfile de Burberry un homenaje a los miembros del Grupo de Bloomsbury. Esta es la nueva tendencia, las flores se vuelven más abstractas y terminan por convertirse en estampados gráficos como el del vestido de Kirsten Dunst.

La flora y la fauna

Lo que queda de Hawai ya no sale solo a la calle, para el próximo verano habrá que hacer como Yasmin Sewell: combinarlo con otros estampados que maticen su aspecto tropical. Pero este otoño, igual que se empieza a imponer una tendencia oriental, el grafismo mezclado con las flores de Anna dello Russo, la moda mira más a la fauna que a la flora y en este cambio de aires las cebras tienen todas las de ganar.