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La Mari de Chambao, Asaari Bibang, Hajar Brown, Tania Llasera, Cristina Gutiérrez y Alba Lago. Todas aceptaron la invitación entusiasmadas. No era una cita para una entrevista más, era una cita para hablar de todos esos temas que quedan pendientes por analizar en profundidad y por conversar en sociedad pero a los que no se les da lugar, porque son temas que preocupan y ocupan a las mujeres. Que un día como hoy o en una semana como esta afloran gracias al Día Internacional de la Mujer, a las manifestaciones y a la agenda mediática que hoy sí se inclina para el lado feminista.
En Divinity comenzamos una iniciativa hace un año que todavía sigue en marcha y que tiene que ver con extender el 8M en tanto día de reflexión y día de lucha más allá del límite de las 24 horas que le asigna el calendario. Intentamos mantener conversaciones sobre feminismos, desigualdad laboral, estereotipos de género, dictadura de la imagen, humor feminista y salud de la mujer a lo largo del 2023. Compartimos aquí algunos fragmentos de estas charlas que llamamos 8M todo el año.
A Tania le pasó lo que a todas: que un varón opinase sobre su peso, sobre su nariz, sobre su belleza. En un contexto laboral, se le pidió bajar algunos kilos y también hacerse una cirugía estética para "triunfar" en la TV. Cumplió el mandato a medias: adelgazó, pero no quiso cambiar su nariz. La suya no es una historia de vencer los mandatos de la imagen. Es una historia de vivir con ellos, sobrevivir a ellos y empezar a pensar un mundo diferente, donde las mujeres no tengan que estar pendientes del espejo nunca más.
"Se nos educa para ser bellas. Me costó mucho entender que podía tener la belleza y además ser inteligente. Pero cuando empiezas a perder tu belleza y tu juventud..." Tal como nos contó en su paso por 8M todo el año, con los años su relevancia en los medios se fue reduciendo. Menos tapas de revistas, menos entrevistas. "Se me prestaba más atención cuando era joven porque estaba más buena".
Asaari es comediante. Tiene miles de seguidores a los que hace reír a carcajadas. ¿Que las mujeres no son graciosas? Ha vencido esos prejuicios con su arte: "La comedia tiene esa justicia de cuando haces gracia, al final la gente no tiene más que rendirse a tu gracia".
Sobre el machismo en el mundo de la comedia, Asaari ha aclarado: "Hay machismo en el mundo, no solo en el mundo de la comedia. En la industria de la comedia sí, te dicen que las mujeres no hacen gracia. O 'no me traigas a una mujer'".
Asaari no solamente es mujer en la comedia. Es, como ella misma define "una mujer negra en la comedia". "Pasa mucho esto de que cuando eres negra ya no eres mujer, ni profesional, ni nada más. Llaman a un casting y dicen 'busco mujer negra', como si ya no pudieras ser otra cosa".
Su discurso es, sin embargo, optimista: "Tengo la esperanza que mi hijo se encuentre con un mundo mejor que el que yo he vivido".
Hace poco más de un mes, se convirtió en la primera española en ganar el Rally Dakar. Meses antes había pasado por nuestro plató para contarnos cómo creció entre motores y cómo para ella nunca fue algo raro el dedicarse a competir como piloto. Sin embargo, lo fue para todos los demás y a pesar de su buen desempeño en competiciones de primer nivel, se dudaba de ella. "Te dicen que por ser mujer no puedes hacer ciertos tiempos o ganarles a ciertas personas", nos ha relatado. Cuando alcanzaba cifras récord, le revisaban el coche por si hubiera algún truco, algo que la ofendía profundamente. Me han revisado el coche después de hacer un buen tiempo. Estoy cansada de que revisen", denunció aquí.
Otro clásico de mujeres al volante, que los técnicos no presten atención a sus opiniones sobre el funcionamiento del coche. "Cuando yo digo que algo no me va bien del coche, no me prestan atención, y si tengo razón, le contestan a mi copiloto".
Además, ser mujer es para muchos, sonreír: "Me exigen estar sonriendo todo el rato. Si estoy de mala leche, estoy de mala leche".
Presentadora de Noticias Cuatro y antes de Informativos Telecinco con el propio Pedro Piqueras, a Alba Lago le ha costado ganarse a la audiencia. "Te tienes que ganar la credibilidad. Las arrugas dan la credibilidad", dijo sobre sus inicios, cuando la juventud no contribuía con la imagen de seriedad que se espera de un periodista ante cámara.
Luego, las críticas no son justas. Según nos contó, en las redes sociales siempre a las mujeres periodistas se las cuestiona por lo estético: "A los hombres se les critica por el tono o por algo que han dicho. Jamás se les va a criticar por cómo lleva el tono de uñas".
En nuestro plató, Hajar ha explicado por qué todavía falta un largo camino dentro del movimiento feminista para no ser excluyente. Hay intersecciones que no se exploran lo suficiente, y que generan separaciones que no ayudan a la lucha. Hajar Brown es influencer, es musulmana y ha decidido usar el hijab como resistencia. "Todo el mundo sabe mejor que nosotras cómo ser mujer", dijo para quienes le indican que usar el velo es una opresión y que la mujer libre no debería llevarlo: "Hay una barrera de prejuicios entre nosotras y el resto del feminismo", denunció. La historia de Hajar es una historia que obliga a reflexionar: ¿es opresión el velo pero no es opresión depilarse? ¿Estar bajo el mandato de la imagen, tener el cabello estupendo y el cuerpo perfecto no es opresión pero el hijab sí? Esta pregunta y otras nos ha dejado en el tintero la activista, así como una definición sobre lo que para ella significa un 8M todo el año: "Un 8M todo el año es vivir siendo mujer, teniendo voz, ocupando espacios. Salir a la calle, que te vean y hacerlo todo sin que nadie te diga cómo lo tienes que hacer".
La cantante que ya es un icono de la música española ya había contado su historia con el cáncer de mama en el libro 'Enamorá de la vida, aunque a veces duela'. Sin embargo, llegó a nuestro plató para reflexionar más allá del tránsito de la enfermedad, sobre todo aquello que recae sobre las mujeres lleno de prejuicios que no solo hacen su vida difícil sino que la ponen en riesgo. Estamos hablando de mujer y de salud. Lo primero: si una de las formas de prevención del cáncer de mama es la autoexploración, ¿por qué no nos tocamos? "A las mujeres les da vergüenza y miedo tocarse. Tócate, tocarse es cuidarse", exclamó en la entrevista.
Además, habló de las expectativas sobre la imagen de una mujer que se dedica a la música y que ella sistemáticamente ha decidido no cumplir. "Como eres mujer tienes que enseñar cacho porque así atraes más. Si quieres enseñar cacho que sea porque te de la gana, no porque seas la cantante de un grupo", se dijo a sí misma y a todas las que quieran escuchar.