"Ha habido tensiones, pero la amistad está por encima de todo"
Todo empezó en el Mundial en el Mundial sub 17 de Egipto, ahí compartieron vestuario por primera vez, pero donde empezó de verdad fue en el de Nigeria. Aquel Mundial sub´20 les marcó. Estaban concentrados en un país africano, jóvenes, recién salidos de la adolescencia, en un hotel con cocodrilos en la piscina. Risas a cada paso, camaradería y ganas de hacer algo grande ante... sólo dos periodistas.
Aquella victoria no sólo les dio la sensación de que años más tarde podrían hacer algo grande. Y lo lograron, fueron campeones de Europa en dos ocasiones y del Mundo muy cerca de allí, en Sudáfrica. Pero aprendieron algo más, a ser humildes. Cuando entrenaban en aquel Mundial sub´20 de Nigeria, vieron cómo los niños cogían las botellas de agua vacías que tiraban para venderas. También vendían el pan que le daban a las palomas, lo mojaban y lo trataban de vender por la calle. Ellos podían haber sido esos niños. Aprendieron mucho de todo aquello, han dicho en múltiples ocasiones. Pero la lección principal, de lo que han hecho gala toda su vida, es de no sufrir de orgullos ridículos.
Han sido humildes, buenos compañeros y poco dados a la gresca en las declaraciones públicas. Para muestra, su reacción tras recibir el premio. Dicen que no es sólo a ellos, que es el reconocimiento a una generación. Raro en un deporte dado al 'soy el mejor, soy el mejor'.
"Ha habido tensiones, pero la amistad está por encima de todo"
Todo empezó en el Mundial en el Mundial sub 17 de Egipto, ahí compartieron vestuario por primera vez, pero donde empezó de verdad fue en el de Nigeria. Aquel Mundial sub´20 les marcó. Estaban concentrados en un país africano, jóvenes, recién salidos de la adolescencia, en un hotel con cocodrilos en la piscina. Risas a cada paso, camaradería y ganas de hacer algo grande ante... sólo dos periodistas.
Aquella victoria no sólo les dio la sensación de que años más tarde podrían hacer algo grande. Y lo lograron, fueron campeones de Europa en dos ocasiones y del Mundo muy cerca de allí, en Sudáfrica. Pero aprendieron algo más, a ser humildes. Cuando entrenaban en aquel Mundial sub´20 de Nigeria, vieron cómo los niños cogían las botellas de agua vacías que tiraban para venderas. También vendían el pan que le daban a las palomas, lo mojaban y lo trataban de vender por la calle. Ellos podían haber sido esos niños. Aprendieron mucho de todo aquello, han dicho en múltiples ocasiones. Pero la lección principal, de lo que han hecho gala toda su vida, es de no sufrir de orgullos ridículos.
Han sido humildes, buenos compañeros y poco dados a la gresca en las declaraciones públicas. Para muestra, su reacción tras recibir el premio. Dicen que no es sólo a ellos, que es el reconocimiento a una generación. Raro en un deporte dado al 'soy el mejor, soy el mejor'.
"Ha habido tensiones, pero la amistad está por encima de todo"
Todo empezó en el Mundial en el Mundial sub 17 de Egipto, ahí compartieron vestuario por primera vez, pero donde empezó de verdad fue en el de Nigeria. Aquel Mundial sub´20 les marcó. Estaban concentrados en un país africano, jóvenes, recién salidos de la adolescencia, en un hotel con cocodrilos en la piscina. Risas a cada paso, camaradería y ganas de hacer algo grande ante... sólo dos periodistas.
Aquella victoria no sólo les dio la sensación de que años más tarde podrían hacer algo grande. Y lo lograron, fueron campeones de Europa en dos ocasiones y del Mundo muy cerca de allí, en Sudáfrica. Pero aprendieron algo más, a ser humildes. Cuando entrenaban en aquel Mundial sub´20 de Nigeria, vieron cómo los niños cogían las botellas de agua vacías que tiraban para venderas. También vendían el pan que le daban a las palomas, lo mojaban y lo trataban de vender por la calle. Ellos podían haber sido esos niños. Aprendieron mucho de todo aquello, han dicho en múltiples ocasiones. Pero la lección principal, de lo que han hecho gala toda su vida, es de no sufrir de orgullos ridículos.
Han sido humildes, buenos compañeros y poco dados a la gresca en las declaraciones públicas. Para muestra, su reacción tras recibir el premio. Dicen que no es sólo a ellos, que es el reconocimiento a una generación. Raro en un deporte dado al 'soy el mejor, soy el mejor'.
"Ha habido tensiones, pero la amistad está por encima de todo"
Todo empezó en el Mundial sub´20 de Nigeria. Estaban concentrados en un país africano, jóvenes, recién salidos de la adolescencia, en un hotel con cocodrilos en la piscina. Risas a cada paso, camaradería y ganas de hacer algo grande ante... sólo dos periodistas.
Aquella victoria no sólo les dio la sensación de que años más tarde podrían hacer algo grande. Y lo lograron, fueron campeones de Europa en dos ocasiones y del Mundo muy cerca de allí, en Sudáfrica. Pero aprendieron algo más, a ser humildes. Cuando entrenaban en aquel Mundial sub´20 de Nigeria, vieron cómo los niños cogían las botellas de agua vacías que tiraban para venderas. También vendían el pan que le daban a las palomas, lo mojaban y lo trataban de vender por la calle. Ellos podían haber sido esos niños. Aprendieron mucho de todo aquello, han dicho en múltiples ocasiones. Pero la lección principal, de lo que han hecho gala toda su vida, es de no sufrir de orgullos ridículos.
Han sido humildes, buenos compañeros y poco dados a la gresca en las declaraciones públicas. Para muestra, su reacción tras recibir el premio. Dicen que no es sólo a ellos, que es el reconocimiento a una generación. Raro en un deporte dado al 'soy el mejor, soy el mejor'.
"Ha habido tensiones, pero la amistad está por encima de todo"
Todo empezó en el Mundial sub´20 de Nigeria. Estaban concentrados en un país africano, jóvenes, recién salidos de la adolescencia, en un hotel con cocodrilos en la piscina. Risas a cada paso, camaradería y ganas de hacer algo grande ante... sólo dos periodistas.
Aquella victoria no sólo les dio la sensación de que años más tarde podrían hacer algo grande. Y lo lograron, fueron campeones de Europa en dos ocasiones y del Mundo muy cerca de allí, en Sudáfrica. Pero aprendieron algo más, a ser humildes. Cuando entrenaban en aquel Mundial sub´20 de Nigeria, vieron cómo los niños cogían las botellas de agua vacías que tiraban para venderas. También vendían el pan que le daban a las palomas, lo mojaban y lo trataban de vender por la calle. Ellos podían haber sido esos niños. Aprendieron mucho de todo aquello, han dicho en múltiples ocasiones. Pero la lección principal, de lo que han hecho gala toda su vida, es de no sufrir de orgullos ridículos.
Han sido humildes, buenos compañeros y poco dados a la gresca en las declaraciones públicas. Para muestra, su reacción tras recibir el premio. Dicen que no es sólo a ellos, que es el reconocimiento a una generación. Raro en un deporte dado al 'soy el mejor, soy el mejor'.
"Ha habido tensiones, pero la amistad está por encima de todo"
Todo empezó en el Mundial en el Mundial sub 17 de Egipto, ahí compartieron vestuario por primera vez, pero donde empezó de verdad fue en el de Nigeria. Aquel Mundial sub´20 les marcó. Estaban concentrados en un país africano, jóvenes, recién salidos de la adolescencia, en un hotel con cocodrilos en la piscina. Risas a cada paso, camaradería y ganas de hacer algo grande ante... sólo dos periodistas.
Aquella victoria no sólo les dio la sensación de que años más tarde podrían hacer algo grande. Y lo lograron, fueron campeones de Europa en dos ocasiones y del Mundo muy cerca de allí, en Sudáfrica. Pero aprendieron algo más, a ser humildes. Cuando entrenaban en aquel Mundial sub´20 de Nigeria, vieron cómo los niños cogían las botellas de agua vacías que tiraban para venderas. También vendían el pan que le daban a las palomas, lo mojaban y lo trataban de vender por la calle. Ellos podían haber sido esos niños. Aprendieron mucho de todo aquello, han dicho en múltiples ocasiones. Pero la lección principal, de lo que han hecho gala toda su vida, es de no sufrir de orgullos ridículos.
Han sido humildes, buenos compañeros y poco dados a la gresca en las declaraciones públicas. Para muestra, su reacción tras recibir el premio. Dicen que no es sólo a ellos, que es el reconocimiento a una generación. Raro en un deporte dado al 'soy el mejor, soy el mejor'.
"Ha habido tensiones, pero la amistad está por encima de todo"
Todo empezó en el Mundial en el Mundial sub 17 de Egipto, ahí compartieron vestuario por primera vez, pero donde empezó de verdad fue en el de Nigeria. Aquel Mundial sub´20 les marcó. Estaban concentrados en un país africano, jóvenes, recién salidos de la adolescencia, en un hotel con cocodrilos en la piscina. Risas a cada paso, camaradería y ganas de hacer algo grande ante... sólo dos periodistas.
Aquella victoria no sólo les dio la sensación de que años más tarde podrían hacer algo grande. Y lo lograron, fueron campeones de Europa en dos ocasiones y del Mundo muy cerca de allí, en Sudáfrica. Pero aprendieron algo más, a ser humildes. Cuando entrenaban en aquel Mundial sub´20 de Nigeria, vieron cómo los niños cogían las botellas de agua vacías que tiraban para venderas. También vendían el pan que le daban a las palomas, lo mojaban y lo trataban de vender por la calle. Ellos podían haber sido esos niños. Aprendieron mucho de todo aquello, han dicho en múltiples ocasiones. Pero la lección principal, de lo que han hecho gala toda su vida, es de no sufrir de orgullos ridículos.
Han sido humildes, buenos compañeros y poco dados a la gresca en las declaraciones públicas. Para muestra, su reacción tras recibir el premio. Dicen que no es sólo a ellos, que es el reconocimiento a una generación. Raro en un deporte dado al 'soy el mejor, soy el mejor'.
"Ha habido tensiones, pero la amistad está por encima de todo"
Todo empezó en el Mundial en el Mundial sub 17 de Egipto, ahí compartieron vestuario por primera vez, pero donde empezó de verdad fue en el de Nigeria. Aquel Mundial sub´20 les marcó. Estaban concentrados en un país africano, jóvenes, recién salidos de la adolescencia, en un hotel con cocodrilos en la piscina. Risas a cada paso, camaradería y ganas de hacer algo grande ante... sólo dos periodistas.
Aquella victoria no sólo les dio la sensación de que años más tarde podrían hacer algo grande. Y lo lograron, fueron campeones de Europa en dos ocasiones y del Mundo muy cerca de allí, en Sudáfrica. Pero aprendieron algo más, a ser humildes. Cuando entrenaban en aquel Mundial sub´20 de Nigeria, vieron cómo los niños cogían las botellas de agua vacías que tiraban para venderas. También vendían el pan que le daban a las palomas, lo mojaban y lo trataban de vender por la calle. Ellos podían haber sido esos niños. Aprendieron mucho de todo aquello, han dicho en múltiples ocasiones. Pero la lección principal, de lo que han hecho gala toda su vida, es de no sufrir de orgullos ridículos.
Han sido humildes, buenos compañeros y poco dados a la gresca en las declaraciones públicas. Para muestra, su reacción tras recibir el premio. Dicen que no es sólo a ellos, que es el reconocimiento a una generación. Raro en un deporte dado al 'soy el mejor, soy el mejor'.
"Ha habido tensiones, pero la amistad está por encima de todo"
Todo empezó en el Mundial en el Mundial sub 17 de Egipto, ahí compartieron vestuario por primera vez, pero donde empezó de verdad fue en el de Nigeria. Aquel Mundial sub´20 les marcó. Estaban concentrados en un país africano, jóvenes, recién salidos de la adolescencia, en un hotel con cocodrilos en la piscina. Risas a cada paso, camaradería y ganas de hacer algo grande ante... sólo dos periodistas.
Aquella victoria no sólo les dio la sensación de que años más tarde podrían hacer algo grande. Y lo lograron, fueron campeones de Europa en dos ocasiones y del Mundo muy cerca de allí, en Sudáfrica. Pero aprendieron algo más, a ser humildes. Cuando entrenaban en aquel Mundial sub´20 de Nigeria, vieron cómo los niños cogían las botellas de agua vacías que tiraban para venderas. También vendían el pan que le daban a las palomas, lo mojaban y lo trataban de vender por la calle. Ellos podían haber sido esos niños. Aprendieron mucho de todo aquello, han dicho en múltiples ocasiones. Pero la lección principal, de lo que han hecho gala toda su vida, es de no sufrir de orgullos ridículos.
Han sido humildes, buenos compañeros y poco dados a la gresca en las declaraciones públicas. Para muestra, su reacción tras recibir el premio. Dicen que no es sólo a ellos, que es el reconocimiento a una generación. Raro en un deporte dado al 'soy el mejor, soy el mejor'.