La rabia de Sara Sálamo por la reacción cómplice de las jóvenes del colegio mayor: "Encima se ponen comprensivas"

Sucedió el pasado domingo por la noche en el Colegio Mayor masculino Elías Ahuja, en plena Ciudad Universitaria de Madrid. Uno de sus residentes abría una de las ventanas de la residencia y gritaba a pleno pulmón: “Putas, salid de vuestras madrigueras como conejas. Sois unas putas ninfómanas, os prometo que vais a follar todas en la capea”. Acto seguido, las voces se multiplicaron, y al grito de ‘Vamos, Ahuja’, cientos de residentes universitarios rugían contra las residentes del Colegio Mayor Santa Mónica, una residencia vecina.

Algunas de las alumnas que residen en este centro han trasladado a los medios, a raíz de que las imágenes corrieran como la pólvora y fueran condenadas en redes sociales, que la acción “se está sacando de contexto”, que “no se han sentido ofendidas” por estos cánticos que no consideran machistas y que hay una “buena relación” entre los colegios.

“Es un pique que siempre ha habido”, quitan hierro al asunto. Incluso han salido en defensa de los chicos y ha animado a la prensa a que se informen “de cómo empieza todo”. “Hay un perdón por parte de ellos y no hace falta llevarlo más allá”, coinciden algunas de las afectadas, que han emitido un comunicado conjunto.

“A pesar de la gravedad, se trata de una práctica con tradición entre colegios mayores de la que se ha creado una impresión de odio y machismo que no puede estar más lejos de la realidad”, excusa el texto, para explicar a continuación que los dos centros implicados siempre han tenido una magnífica relación. “Conocemos de primera mano sus valores y principios, ninguno de ellos con intención de realizar un discurso misógino ni mucho menos denigranos como mujeres”, añaden, antes de pedir “discreción”.

Estas declaraciones han generado un gran revuelo en redes sociales. Que no hayan condenado lo sucedido ha enfadado a miles de usuarios, entre otros, a Sara Sálamo, que se quedaba estupefacta con su condescendencia.

“Casi creo que esto es peor que el primer vídeo”, lamentaba la actriz, que cree que esto es, básicamente, “no entender la problemática”: “Las mujeres vejadas, de nuevo, en la posición de comprensivas. Ellos las llaman putas. Ellas dicen que hay que entender el contexto y no sacar las cosas de quicio”, analizaba la situación, asegurando que siente “pena y rabia” por este suceso. “¿Saldrán también a dar la cara por los cánticos nazis de sus compañeros?”, se preguntaba.